Enfrentados por el proyecto de urbanización de 8.000 metros cuadrados para hacer una plaza ajardinada en los terrenos de la fallida Ciudad de la Justicia de Benalúa reiteradamente prometida por el anterior gobierno del Consell y nunca construida. Así acabaron ayer el tripartito que gobierna el Ayuntamiento y el grupo municipal del PP en la Comisión de Urbanismo en la que tenía que aprobarse la ratificación de la solicitud de inclusión del proyecto en el Plan Provincial de Cooperación a las Obras y Servicios para 2017, con el objetivo de conseguir de la Diputación una subvención de 450.000 euros, casi la mitad de lo que cuesta este parque, presupuestado en un millón de euros.

Los ediles populares que están en esta comisión, Luis Barcala, Carlos Castillo, Mari Ángeles Goitia e Israel Cortés votaron en contra del punto al considerar que el proyecto no está acordado con los vecinos de la zona. Una afirmación que hizo que acabaran a la gresca con el vicealcalde y concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, que salió indignado de la reunión.

«El señor Barcala ha tenido la desfachatez de decir que miento cuando afirmo que se trata de un proyecto acordado con los vecinos, a lo que le he replicado que el que miente es él cuando afirma que el proyecto no lo quieren los vecinos. El PP está muy nervioso porque este equipo de gobierno está evidenciando su incapacidad y sus mentiras una y otra vez y porque estamos llevando adelante importantes inversiones para los barrios y para la ciudad frente al raquítico nivel de inversiones de los presupuestos que el PP aprobó en la pasada legislatura». Así las cosas, Pavón les pidió «que dejen de torpedear proyectos que son necesarios para los barrios y para la ciudad y que son demandados por la ciudadanía» y concluyó diciéndoles «que se tomen una tila».

Pavón espera que el pleno que se celebra el jueves acuerde la ratificación de la solicitud de subvención a la Diputación, paso previo necesario para conseguir la ayuda, de ahí la Comisión de Urbanismo urgente de ayer. Al vicealcalde le preocupa que el edil Carlos Castillo, vicepresidente de la institución provincial, haya votado en contra. En el mismo sentido se manifestó el portavoz del equipo de gobierno, Natxo Bellido, quien indicó que espera que el voto en contra del PP en la comisión «no sea para anunciar que Carlos Castillo no va a apoyar el proyecto en la Diputación».

Así las cosas, el presidente de la Diputación, César Sánchez (PP), dijo, tras un acto en el ADDA, conocer poco del proyecto en sí «porque todo ha sido muy reciente» pero añadió que la institución «está al servicio del municipalismo, con independencia del color político», por lo que estudiarán y analizarán la petición, avanzó.

Sea como sea, Pavón replicó a Castillo afirmando que han mantenido seis reuniones con la asociación de vecinos Francisco Albert para llevar adelante un proyecto en común, indicando las fechas, «la última de ellas el 12 de julio, justo antes de aprobarlo en la Junta de Gobierno. Es un proyecto acordado con los vecinos, ellos nos han dado el visto bueno, claro que lo quieren y cuanto antes». Al término de la comisión de ayer, Pavón llamó a la asociación y habló con Mari Carmen Font, «que se ha quedado un poco perpleja y me ha reiterado que quieren que se haga».

La comisión dictaminó a favor de la ratificación de la petición de subvención con 8 votos a favor del equipo de gobierno, 4 en contra del PP y tres abstenciones de Ciudadanos. Previamente, estos dos grupos votaron en contra de la urgencia de la moción, que el tripartito tuvo que sacar adelante con el voto de calidad de Pavón al ausentarse temporalmente uno de los miembros de la comisión por el equipo de gobierno.