La decidida apuesta emprendida por el Gobierno de España para que la Agencia Europea del Medicamento recale en Barcelona si acaba saliendo de Londres por las consecuencias del «Brexit» no hará que Alicante retire su candidatura a acoger la Euroagencia, cuya instalación supondría un impacto de 50 millones de euros al año en el PIB de la ciudad. Fuentes de alcaldía, encabezada por el primer edil Gabriel Echávarri, aseguraron ayer que «vamos a seguir presentando la declaración institucional para que el Gobierno sepa oficialmente de nuestro interés por si Barcelona queda descartada de entrada por la UE por su incertidumbre futura», en respuesta al apoyo oficial a la Ciudad Condal expresado el viernes por la vicepresidenta en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría.

En este contexto, desde el consistorio alicantino subrayan que según una encuesta de esta semana, «los separatistas en Cataluña superan por primera vez a los que no se quieren separar». «Entendemos que un gobierno responsable no puede apostar todo a una ciudad sin tener una alternativa», añaden las mismas fuentes, motivo por el que el Ayuntamiento ha decidido «mantener nuestra candidatura y nuestra ilusión aun cuando sabemos que para el Partido Popular (PP) esta cuestión parece ser que no es más que otra parte de las contraprestaciones que van a regalar a los independentistas a cambio de su apoyo a la investidura a Mariano Rajoy».

Compromís va de la mano del consistorio alicantino en sus reivindicaciones ante la parcialidad mostrada por el Gobierno en funciones del PP, más aún cuando el alcalde Echávarri había anunciado el pasado martes el respaldo de la Generalitat a la candidatura de la ciudad para ser sede de la Euroagencia. Así, el diputado de A la Valenciana en el Congreso Ignasi Candela censuró ayer la decisión anunciada por la vicepresidenta Sáenz de Santamaría de apostar por Barcelona como hipotética sede de la Agencia Europea del Medicamento, entidad encargada de supervisar y controlar todas las marcas de fármacos que se mueven en territorio de la Unión Europea.

Candela criticó que de esta manera no se dé «oportunidad a otras ciudades de acoger la Agencia, sin igualdad de concurrencia y sin basarse en unos criterios objetivos», recordando que «Alicante ha presentado públicamente su candidatura para instalarla, teniendo en cuenta además que ya es sede de la agencia de patentes y marcas desde 1994».

Por último, el parlamentario consideró que el «diputado del PP por Alicante José Manuel García-Margallo no tiene ningún interés en defender los intereses de Alicante y sus comarcas, y debería explicar en base a qué intereses políticos se ha basado la designación de Barcelona».