La bandera arcoiris tomó ayer el centro de Alicante en una manifestación multitudinaria para reivindicar los derechos del colectivo de lesbianas, gays, transexuales y bisexuales (LGTB). Así, el Orgullo reunió a decenas de asociaciones y miles de personas, que desfilaron desde Luceros hasta el Ayuntamiento y mostraron su apoyo al colectivo.

La marea multicolor celebró ayer el fin de una fiesta que comenzó el pasado 15 de julio con la colocación de la bandera arcoiris en el balcón de la casa consistorial por segundo año consecutivo.

La manifestación, en la que tomaron parte cerca de 8.000 personas, según la organización, estuvo encabezada por la pancarta que reproducía el lema «Visibilitat bisexual en la diversitat». Y es que este año, la celebración del Orgullo se ha centrado en la lucha del colectivo bisexual. «Las personas bisexuales se enfrentan a un estereotipo de viciosos y promiscuos», explicó Juan David SantiagoJuan David Santiago, presidente de Diversitat LGTB, asociación organizadora de los actos del Orgullo.

A la cabeza de la comitiva, además de Santiago, iban la concejal de Igualdad, María José Espuch, y la edil de Juventud, Marisol Moreno. El alcalde de Alicante, Gabriel Echávarri, se unió a la manifestación horas después, una vez concluida la asamblea del Partido Socialista.

A ritmo de batucada, varias asociaciones alicantinas y de otros puntos de la provincia participaron en la jornada. Colectivos como LGTB Crevillent, LGTB Yecla, Gitanas Feministas por la Diversidad y Dignidad Animal acompañaron a la comitiva. Asimismo, organizaciones sindicales y partidos políticos de toda la provincia participaron en la manifestación.

La marcha estuvo amenizada por un grupo de travestis subidos a un descapotable rojo y un pequeño remolque en el que, entre otros, iba el representante de Mr. Gay Murcia.

Manifiesto

Orgullo es equidad y justicia social, es feminismo, es pluma, es lucha y dignidad y también mestizaje. Esas fueron las principales ideas que el secretario general de Diversitat, Juan David Santiago, trasladó a todas las personas que se reunieron en la plaza del Ayuntamiento para escuchar la lectura del manifiesto, que reclamaba una «igualdad real».

«Hay que denunciar con especial ahínco la plumofobia, esa discriminación que, sobre todo en las escuelas, mediante el bullying LGTBfóbico se ceba con niños, jóvenes y adolescentes», denunció Santiago. «Pedimos medidas preventivas frente al acoso escolar por razón de orientación sexual y/o identidad de género», demandó el presidente de la asociación organizadora del Orgullo. El colectivo LGTB también reclamó leyes para la igualdad de las mujeres y exigió la despenalización universal de cualquier orientación sexual.

Santiago también recordó y homenajeó a las 49 personas que fueron asesinadas en la discoteca Pulse de Orlando: «Las mataron por el simple hecho de vivir su vida de la manera en que eligieron hacerlo».