Debutaron la pasada romería de la Santa Faz vendiendo dulces y la experiencia fue tan positiva, que las hermanas Clarisas han decidido ir un paso más allá. Cinco monjas de la orden que custodia la Reliquia, junto a tres voluntarias, recibieron ayer un curso para la obtención del carné de manipulador de alimentos. La formación fue impartida por profesores de la Cámara de Comercio de Alicante en el propio monasterio.
«Fueron las monjas quienes nos llamaron interesadas en hacer el curso y ver cómo se podía organizar teniendo en cuenta que son de clausura y no se pueden desplazar hasta el centro de Alicante, así que hemos venido nosotros a impartirlo aquí de manera totalmente gratuita», señala Carlos Mazón, director de la Cámara de Comercio, quien ayer hizo entrega de los carnés a las ocho alumnas.
Con el título ya en la mano, las monjas quieren dar un mayor impulso a la venta de dulces que les ayuden a obtener fondos para el mantenimiento, restauración y gastos del convento. «En Santa Faz hicimos una primera prueba y fue todo un éxito», señala la hermana María Clara. Desde entonces, añade, «nos han hecho muchos pedidos por encargo, así que era necesario tener todo en regla para poder vender los productos».
El recetario de las hermanas Clarisas es enorme. Tarta de San Francisco, tarta de Santa Faz, magdalenas normales y de chocolate, rollitos de vino, rollitos de anís, además de los tradicionales dulces de Santa Clara... Y aunque ellas siguen los pasos de otras Clarisas que en España venden ya dulces, la hermana María Clara asegura que todas estas recetas, «son de la casa» y que posiblemente se amplíen conforme vayan adquiriendo práctica, «incluso podemos llegar a hacer pan».
La idea de las hermanas es vender estos productos a diario, de lunes a domingo, en la tienda del monasterio donde actualmente se venden recuerdos bendecidos, como rosarios, estampas o pulseras.
Antes de comenzar la venta directa al público, necesitan hacer unos pequeños cambios en la cocina del convento. «El horno que tenemos es pequeño, habría que cambiarlo por otro de mayor capacidad». La formación recibida ayer ha permitido a las hermanas ponerse al día en cuanto a la normativa vigente para la manipulación de alimentos. Según explica Pilar Santacruz, responsable de formación de la Cámara, «en el curso abordan temas como el de la conservación de los alimentos, la manipulación, la limpieza de manos o las enfermedades causadas por los alimentos». El carné que han obtenido las hermanas Clarisas tras el curso de ayer es genérico para hostelería, comercio de alimentos y elaboración de repostería.
Las hermanas Clarisas llevan 500 años custodiando la Reliquia de la Santa Faz. Actualmente son nueve las hermanas de clausura y siete aspirantes, chicas que quieren conocer la vida religiosa antes de decidir si ingresan.
