Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Las brigadas contra las plagas vuelven a trabajar

Los trabajadores forestales regresan a los montes tras renovar Medio Ambiente el contrato

Las brigadas de control de plagas han comenzado a trabajar en el Moralet. información

Después de cinco meses de inactividad, las brigadas forestales que se encargan del control de las plagas en los montes de la Comunidad Valenciana han vuelto a trabajar una vez que la Generalitat ya ha renovado la encomienda con la empresa encargada de contratar a los operarios que desarrollan estas tareas.

En la provincia de Alicante, según señalan fuentes próximas a la Conselleria de Medio Ambiente, las primeras tareas se han centrado en el mantenimiento de las zonas verdes situadas en el Moralet y La Alcoraya. Tras un invierno extremadamente seco y caluroso, la tarea de las brigadas se está centrando sobre todo en cortar los árboles secos para evitar que puedan provocar incendios en los próximos meses de verano con la subida de las temperaturas.

Sequía

En cuanto a las plagas, y una vez terminado el ciclo de la procesionaria, las brigadas están controlando al tomicus, un insecto que se mete por la corteza del árbol, ataca al tronco y provoca la muerte del árbol, al impedir que circule la savia de la que se alimenta. En este sentido, en el Moralet se han encontrado árboles afectados por este insecto. Aunque, según reconocen las mismas fuentes, «lo peor está siendo la sequía, que debilita extremadamente al pino sequíay le hace más vulnerable a este tipo de plagas». Y es que, cuánto más débil es el árbol, menos resina produce y más expuesto queda a las plagas de los insectos. En estos momentos, los brigadistas están localizando ejemplares afectados para cortarlos, descortezarlos, podarlos y triturar los restos.

Al final del verano será el momento de controlar la procesionaria, colocando trampas de feromonas para atrapar a los machos y cortar así el ciclo reproductor de esta especie.

En la provincia de Alicante trabajan dos brigadas formadas por cuatro operarios cada una de ellas. Los trabajos de las mismas quedaron paralizados el pasado mes de diciembre, en pleno periodo de actividad de la procesionaria, que el invierno pasado afectó con especial virulencia a los montes de la provincia. En la ciudad de Alicante se dejó sentir en las zonas verdes de la Serra Grossa, Orgegia o el Benacantil, donde la empresa encargada del mantenimiento de estas áreas llevó a cabo semanas atrás una intensa labor de limpieza y poda de centenares de árboles secos. También se está apostando por reforestar la provincia con otras especies distintas a los pinos, más delicadas que otras autóctonas del Mediterráneo, como el palmito o el algarrobo. La provincia enlaza ya su tercer año consecutivo de sequía y el invierno que dejamos atrás ha sido el más caluroso de los últimos 140 años.

Compartir el artículo

stats