La concejala socialista Gloria Vara se enfrentó a un agente de la Policía Local por ponerle una multa al haber estacionado mal su coche en un carril de circulación, con la consiguiente obstaculización del tráfico en las inmediaciones del colegio Franciscanas de San Blas y en plena hora de salida de los escolares. Según la documentación a la que ha tenido acceso este diario, la edil amenazó al agente con abrirle un expediente a pesar de no tener esa facultad y a gritos le espetó que ella era «su jefa» y tenía que obedecerla, con una actitud calificada de airada por el efectivo, y señalándole con el dedo. Además de la multa por la infracción de tráfico el agente levantó un acta de denuncia por «una posible falta de respeto hacia agente de la autoridad» que será remitida a la Subdelegación del Gobierno.

Los hechos ocurrieron el miércoles en la calle Padre Recaredo de los Ríos. Uno de los agentes que controlaba la salida del colegio constató que había un vehículo que inutilizaba un carril de circulación, sin nadie en su interior y con una cartulina en el salpicadero del Ayuntamiento de Alicante que autoriza a aparcar en zonas de carga y descarga, pero no invadiendo un carril de circulación. El agente, que no llevaba encima su talonario de denuncias, tomó los datos del vehículo en una libreta y esperó junto al coche alrededor de diez minutos. Pidió por radio que fuera la grúa y cinco minutos después apareció la edil Gloria Vara, que salía de un bar cercano. Subió al coche y el agente le informó de que recibiría en su domicilio la notificación de la denuncia. Fue entonces cuando, con «aire altanero y despectivo», según la documentación, le preguntó: «¿Este es el Cuerpo de la Policía Local que está para ayudar al ciudadano?». Con aire desafiante, según el agente, dijo que pagaría la denuncia y se marchó.

Pero no lo hizo. Aparcó el coche bien unos metros más adelante y se dirigió de manera apresurada hacia el agente. Con actitud «desafiante y autoritaria» le espetó que era la edil de Infraestructuras y «no iba a quedar así» la cosa, que al día siguiente hablarían. El agente le reprochó que su actitud «decía mucho de ella». Su reacción, según el efectivo, fue «agresiva» porque comenzó a gritarle preguntándole «qué le había dicho» y le instó a repetírselo delante de otro agente, que estaba controlando la salida del colegio. Según el policía, volvió a gritarle asegurándole que era su jefa y que tenía que obedecerle dirigiéndose a él y poniendo el dedo delante de su cara. Fue entonces cuando el agente le pidió la documentación para comprobarlo, pero ella hizo caso omiso y le amenazó, según la versión del agente, con abrirle un expediente. Ella se marchó y entró de nuevo al bar del que había salido.

Contradicciones

En declaraciones a este diario, la edil dio una versión repleta de contradicciones. Si bien en un primer momento confirmó que la habían multado, después dijo no saberlo y rechazó relatar con detalle su versión de lo ocurrido. Se limitó a asegurar que había abierto un «expediente de averiguación de hechos por insultos a mí», si bien segundos después negó que la insultaran o que ella lo hiciera. Lo que sí reiteró en varias ocasiones es que «me trataron como a una delincuente cuando su obligación es conocerse el reglamento». Vara hizo referencia al «reglamento de trato a la autoridad pública» y agregó: «Yo sólo dije soy fulanita de tal y como tal ustedes tienen que cumplir el reglamento y cuando dije eso, me pidieron que enseñara el DNI y eso sólo lo hacen cuando tienen un indicio de delito».

Acerca de cómo tenía estacionado el coche, Vara no quiso aclararlo y se limitó a asegurar que es su vehículo particular «con un permiso oficial porque no tenemos coches oficiales y los oficiales tienen unas prerrogativas». Incidió en que «ni estaba en un bar ni estaba cancaneando, estaba trabajando» y afirmó que se encontraba reunida con la presidenta de una asociación de vecinos cuando ocurrieron los hechos. «Si me han puesto una multa, la pagaré y si entiendo que está mal puesta, recurriré», afirmó Vara.

La edil socialista, visiblemente molesta, apuntó hacia su compañero de filas, el edil de Seguridad, Fernando Marcos. «Preguntarle a él por qué está pasando, qué está haciendo mal con la Policía Local y con los Bomberos», dijo la edil, quien agregó: «Qué le pregunten a él no a mí ni al alcalde, somos las víctimas». Vara aseguró que hace un par de meses «se llevaron el coche del alcalde estando bien aparcado», si bien el vehículo se retiró por una competición deportiva en la vía pública y cuando el primer edil se interesó en pagar se le informó de que, en esos casos, la retirada no conlleva coste. Vara, interpelada por su ataque a un compañero de su mismo partido, repitió en dos ocasiones: «Es concejal del equipo de gobierno, como lo es Daniel Simón y Miguel Ángel Pavón».