Mañana acaba el plazo para que las empresas interesadas presenten sus ofertas a la licitación por 20 millones de euros de la contrata más abultada de las que tiene la Universidad de Alicante, la de la limpieza de las instalaciones, por un plazo de dos años.

La central sindical CGT ha pedido al Rectorado que rescate la concesión de este servicio o que, al menos, no acepte que se presente a renovar el contrato al actual adjudicataria Cívica Servicios, del grupo Ortiz, «porque su máximo accionista, Enrique Ortiz, no representa el talante moral y ético que se le debe exigir, al estar presuntamente implicado en múltiples causas judiciales».

El vicerrector en funciones, Rafael Muñoz, señala que la UA no se plantea el rescate de la concesión por cuestiones de racionalización, y que no se puede impedir a ninguna empresa de antemano que se presente. «Los requerimientos legales se refieren a criterios técnicos y avales económicos que deben cumplir, y hemos añadido criterios de sostenibilidad e igualdad por primera vez».