La conselleria de Vivienda ha ampliado el plazo de solicitud de subvenciones para evitar la pobreza energética en hogares con riesgo de exclusión social hasta final de año.
Las ayudas para evitar la pobreza energética para los casos de corte de suministro eléctrico o de gas son de 75 euros por recibo mensual, hasta un máximo de 300 euros por consumidor y año, y en el caso de corte de agua potable, hasta 15 euros por recibo mensual y un máximo de 60 euros por consumidor y año.
Asimismo podrán ser objeto de ayudas los costes derivados de restablecer los suministros en el caso de que se haya producido su corte. En cuanto a las ayudas para el alquiler social, que también se tramitan a través de los servicios sociales de los Ayuntamientos, la cuantía es de hasta 100 euros mensuales durante un año, y en ningún caso podrá superar el importe de la renta.
Los destinatarios de la subvención son los municipios. De esta forma, cuando los servicios sociales de los ayuntamientos detectan el caso de una persona o familia en situación de vulnerabilidad, con serias dificultades para el pago del suministro de electricidad o de gas, o que ya se ha producido la suspensión del suministro, realizan una valoración para determinar si pueden ser beneficiarios de la ayuda. Si reúne los requisitos, los servicios sociales lo ponen en conocimiento de las empresas suministradoras y de la Conselleria y se paraliza el procedimiento de suspensión del suministro mientras se gestiona el pago de las facturas adeudadas.
Ya se ha iniciado el trámite de las primeras resoluciones para proceder al pago de las ayudas, que ascienden a un importe de 587.283 euros. Esto supone que, por el momento, 3.315 familias se han beneficiado en la Comunidad Valenciana.
