La llegada de una bolsa de aire de Poniente ha provocado hoy que la Costa Blanca registrara una jornada más próxima al verano que comienza el 21 de junio que el invierno que se despidió a finales de marzo. Los termómetros alcanzaron máximas e 26 grados en Elche, pero ninguna población de la franja litoral bajó de los 22 grados. El resultado fue playas y terrazas llenas en un situación típica, por otro lado, de la primavera, ya que cuando se retiró el sol volvió el fresco, sobre todo el interior. No obstante, nada que ver con el invierno, pues la mínima la marcó Villena con 8 grados positivos. La previsión de la Agencia Estatal de Meteorología anuncia tiempo estable hasta el fin de semana con jornadas como la de ayer. Torrevieja alcanzó los 25 grados; Alicante llegó a los 24 y en Benidorm, benidormenses y turistas disfrutaron de 23 grados de máxima, pero con un sensación térmica dos grados más alta al sol. De lluvias, ni rastro.