El Ayuntamiento de Alicante y el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) llegaron ayer a un principio de acuerdo para establecer un servicio de autobuses-lanzadera que conecte la estación-término del AVE con las localidades de Benidorm y Torrevieja, aunque el que la iniciativa llegue a buen puerto dependerá de si Renfe, operadora de la línea de alta velocidad, acepta crear un billete combinado tren-autobús similar al que tiene operativo con el TRAM, según explico Fernando Marcos, concejal de Tráfico y Movilidad. El edil se reunió con los responsables de Adif, titular de la estación, para plantearle la fórmula elegida, que pasa porque los autobuses puedan entrar en el aparcamiento de taxis y coches de alquiler y recoger a los pasajeros para partir de ahí hacia Benidorm y Torrevieja pasando primero por la estación de autobuses.

«Lo que tanto Adif como el Ayuntamiento tenemos claro es que no se trata de establecer una línea regular de autobuses convencional porque no hay posibilidad de establecer paradas en el casco urbano, ni tampoco hacerla sin contar con la estación de autobuses», señaló Marcos, quien avanzó que ha quedado en enviarles un informe sobre los autobuses que harían falta para que Adif estudie qué sistema implantar, y dónde pueda establecerse este aparcamiento de buses-lanzadera. Tampoco se quiere dejar de lado a los taxistas, un sector que desde el primer día ha venido ofreciéndose para realizar el servicio con un precio concertado.

Tráfico tiene sobre la mesa un proyecto para habilitar una entrada para vehículos entre la avenida de Aguilera y la estación de Adif de cara a las futuras lanzaderas del AVE con Benidorm y Torrevieja. El objetivo de esta fórmula es que estos autobuses no colapsen otras arterias pegadas a la terminal, como las avenidas de Óscar Esplá y Salamanca, pero la última palabra la tiene el Adif.

El transporte a sus destinos de los turistas que llegan a la Costa Blanca en tren es una de las asignaturas pendientes del sector y la Administración desde que hace ya casi tres años (próximo junio) llegó a Alicante la línea de alta velocidad, que deja la capital de la provincia a poco más de dos horas de la estación madrileña de Atocha. Mientras los servicios punto a punto desde el aeropuerto a Torrevieja, Santa Pola, Benidorm y Calp funcionan perfectamente y con cientos de usuarios, Alicante siempre ha tenido reticencias. No obstante, muchos hoteles y el Imserso disponen de autobuses «chárter» para trasladar a sus turistas entre los hoteles y la estación.

El TRAM -200.000 usuarios- es otra opción pero lenta porque el tranvía se coge en la plaza de los Luceros y tarda una hora de cubrir el viaje.