Las tres grandes superficies de la periferia de Alicante recurrieron en enero de 2015 a la Cámara de Comercio para pedir que les apoyara en su pretensión de abrir los domingos y festivos en Semana Santa y verano tras las negociaciones con responsables del Ayuntamiento y del Consell, entonces dirigidos por el PP.
El escrito está fechado el 15 de enero de 2015, un día antes del que los directores de los tres centros comerciales Gran Vía, Plaza Mar 2 y Puerta de Alicante remitieron al Ayuntamiento de Alicante instando a los responsables municipales a permitirles abrir los domingos y festivos en las temporadas de verano y Semana Santa. La propuesta se asemeja a la que plantea el Consell, pero dista de la que propone el alcalde, Gabriel Echávarri. Y es que este último quiere que todas las grandes superficies de la ciudad puedan abrir durante todos los festivos del año.
Un representante de los tres centros comerciales firma el escrito dirigido a la Cámara de Comercio. En él se alude a la petición que las grandes superficies realizaron en octubre de 2014 al Ayuntamiento para que ampliara la Zona de Gran Afluencia Turística existente entonces. Tres meses más tarde concretaron su petición en abrir los domingos de Semana Santa y verano.
Así se recoge en el escrito enviado a la Cámara en el que se indica que «como consecuencia de las reuniones mantenidas tanto con el Ayuntamiento de Alicante como con la propia Dirección General de Comercio, la pretensión» de los centros comerciales «se vería satisfecha aún en el caso de que la pretendida flexibilidad horaria se produjera únicamente de forma estacional y en los términos previstos para la zona de playas». Esto es, en Semana Santa y verano. Esta es la «pretensión» que trasladaron también al Ayuntamiento en ese momento.
Un año después, la situación en la ciudad es que ninguna gran superficie comercial puede abrir en festivo, tras la polémica decisión del Consell a petición del Ayuntamiento de excluir Maisonnave de la zona de libertad horaria. El alcalde plantea ahora una medida más aperturista de la que los centros comerciales negociaron con el anterior gobierno del PP, al proponer la apertura todos los domingos y festivos del año.
Aunque Echávarri asegura tener conocimiento del escrito que los centros comerciales enviaron al Ayuntamiento en enero de 2015 en el que se aludía a las reuniones con responsables municipales y autonómicos y se planteaba abrir sólo los festivos de Semana Santa y verano el regidor sostiene que cuando entró al gobierno lo que encontró sobre la mesa «no fue un acuerdo, sino una demanda» y que «un único centro comercial abría los domingos y los demás estaban cerrados». Por ello, insta «a las dos partes en referencia al anterior equipo de gobierno y a los centros comerciales a explicar los términos de ese supuesto acuerdo».
La demanda a la que hace referencia Echávarri y en la que justifica su propuesta de abrir el comercio de la ciudad todos los festivos está fechada el 19 de mayo de 2015, cinco días antes de las últimas elecciones locales. En el recurso contencioso administrativo los centros comerciales se refieren a la petición que realizaron al Ayuntamiento de ampliar la zona con libertad horaria en octubre de 2014 y rechazan la «desestimación presunta» de la misma por no haberla resuelto.
El alcalde viene defendiendo su propuesta esgrimiendo que, de salir adelante el recurso, la libertad horaria podría ampliarse a toda la ciudad sin que el Ayuntamiento tuviera margen para haber negociado a cambio la creación de 625 puestos de trabajo y que ningún empleado de plantilla trabajara más de 13 festivos al año. Ante el malestar y las numerosas dudas que trabajadores de grandes superficies le plantearon en un programa de la Cadena Ser acerca del cumplimiento de esos compromisos, Echávarri se escudó afirmando que la medida que plantea debe «evaluarse en un año» y que «si al alcalde le engañan, se revertirá la situación».
Desde Facpyme, su secretario general, Francisco Rovira, consideró que el argumento del empleo «no se sustenta» y que la decisión que se adopte «no podrá ser reversible porque se generarían unos derechos y las grandes superficies podrían ganar en un tribunal».
En cuanto al planteamiento de permitir abrir a las grandes superficies los domingos sólo en temporada alta, Echávarri incidió en que ya lo ha sondeado, pero los empleados trabajarían 26 festivos y no se generaría empleo. Su socio de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, sostiene que «no nos gusta la música», mientras desde Compromís, Natxo Bellido, lo considera «un escenario para negociar».
