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El tripartito dejará pagar el IBI en cinco plazos sin intereses

La entidad local recupera la gestión de los impuestos de manos de SUMA

El tripartito dejará pagar el IBI en cinco plazos sin intereses

Con la entrada del nuevo año, el Ayuntamiento de Alicante ha recuperado la gestión de impuestos que el anterior equipo de gobierno del PP cedió en 2014 a SUMA -entidad tributaria de la Diputación- y que el tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís) decidió recuperar. El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) reporta unos ingresos de unos 88 millones de euros a las arcas municipales y será el primero en salir al cobro: entre el 15 de marzo y el 31 de mayo.

El Ayuntamiento mantendrá la posibilidad que ya ofrecía cuando gestionaba los tributos de fraccionar en dos el pago (uno el 3 de mayo y otro el 30 de septiembre) e introducirá «un nuevo fraccionamientofraccionamiento» que ofrece la posibilidad de pagarlo «en cinco mensualidades sin intereses». Así lo explican técnicos de la Concejalía de Hacienda, que indican que las cuotas se repartirán entre el 3 de abril y el 3 agosto, lo que supondría que cada mes se abonaría un 20% del recibo.

Para optar a ello, los contribuyentes deben, como únicos requisitos, tener domiciliado el recibo y éste (o la suma de los de varias propiedades de un mismo titular) debe tener un importe de entre 100 y 6.000 euros. Técnicos municipales explican que la ley ya permite aplazar el pago de impuestos, pero indican que este procedimiento implica el pago de intereses. Al respecto, sostienen que el fraccionamiento en cinco meses sin intereses es una «facilidad adicional» para los contribuyentes. Para solicitarlo, los contribuyentes deben dirigirse a las oficinas municipales (calle Jorge Juan) o telefónicamente, por internet o a través del número que el Ayuntamiento tiene pendiente habilitar.

Desde Suma recuerdan que también permitían el fraccionamiento del pago hasta en seis plazos dependiendo de la cantidad del recibo, pero con el pago de «un pequeño interés», que no concretaron. Indican, igualmente, que ofrecían a los contribuyentes la posibilidad de acogerse a un plan de pagos personalizado, eligiendo la cantidad y los plazos para las entregas a cuenta. Por ejemplo, podían establecer un pago mensual a lo largo de los 12 meses y al llegar el periodo de pago se regularizaba para liquidar la diferencia.

Un plan de pagos que el Ayuntamiento de Alicante, al menos por el momento, no está en disposición de ofrecer. Las mismas fuentes explican que se trata de un procedimiento «complejo» por la infraestructura «de intervención y tesorería» que requiere. «Si hubiera una demanda por parte de los ciudadanos, se estudiaría, pero la infraestructura no está adaptada a ese sistema de recaudación a cuenta», explican las mismas fuentes, quienes indican que hasta no aprobarse el padrón no comenzarán a cobrar por los impuestos.

En cuanto a los plazos de cobro del IBI y de la tasa de basuras entre el 15 de marzo y el 31 de mayo también hay novedades. Con Suma comenzaba el 25 de marzo y finalizaba el 5 de junio. Los técnicos indican que, con anterioridad, el Ayuntamiento cerraba el cobro alrededor del 15 de mayo y se ha decidido ampliar el plazo hasta finalizar el mes para facilitar el pago a los pensionistas.

El IBI es el principal tributo municipal, dado que reporta unos ingresos de alrededor de 88 millones de euros. Sale al cobro junto con el recibo de la tasa de basura, que permitirá ingresar otros 9,5 millones. Se trata de los dos primeros tributos que saldrán a recaudación este año, en el que la gestión de los mismos vuelve a estar en manos del Ayuntamiento.

El anterior gobierno local firmó un convenio con Suma para que a partir de 2014 y hasta 2017 gestionara la recaudación a cambio de un canon anual de 2,5 millones de euros. El tripartito decidió rescindir el contrato antes de tiempo, esgrimiendo que las arcas municipales se ahorrarían cuatro millones de euros al año. Unas cifras que la entidad de Diputación replicaba asegurando que logró incrementar en 6 millones los ingresos municipales. Con todo, Ayuntamiento y Diputación acordaron rescindirlo, por lo que la recaudación vuelve a manos municipales. SUMA, no obstante, mantiene el cobro de los mismos en la vía ejecutiva (cuando no se han abonado en el periodo voluntario de pago).

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