Según Maciá, la negociación entre ambas partes está totalmente bloqueada y el punto más conflictivo de la negociación es el artículo referente "a las carencias de incentivos en la mesa negociadora".

Para el sindicalista, la patronal zapatera quiere eliminar el 3 por ciento anual de incentivos que se suman al salario de los trabajadores, y proponen un aumento del 2 en el salario.

Por su parte, los sindicatos UGT y CCOO no están dispuestos a ceder en esta medida ya que, en palabras de Maciá, se ha estado "mucho tiempo detrás de esta medida y ahora no queremos que se suprima".

Las dos partes se reunieron ayer por la tarde, en lo que constituyó la cuarta reunión del año sobre el convenio colectivo para un sector que cuenta con 38.000 trabajadores de toda España.

Se estima que el 60 por ciento de estos empleados se ubican en la provincia de Alicante mientras que el resto corresponde a Castilla-La Mancha y a Baleares.

Por su parte, el secretario de la Asociación de Industriales de Calzado (AICE);, Pedro Méndez, indicó hoy que los sindicatos "tienen todo el derecho de hacer huelga" aunque advirtió de que "el sector no está para muchas tensiones".

Méndez manifestó que la patronal "está dispuesta a negociar un convenio justo y razonable" ya que los empresarios "hacen un esfuerzo por fabricar en España y no irse a otros lugares".

Añadió que los empresarios no quieren "mermar el salario de los trabajadores" y consideró que todavía no se han roto las negociaciones "ya que en un mes habrá otra reunión".