Los universitarios de la provincia dan por terminada la crisis económica, se han vuelto más críticos y empiezan a exigir de las empresas el pago de unas prácticas que en los últimos años han realizado de forma totalmente altruista y con la única intención de obtener experiencia.
Los observatorios de Inserción Laboral y Ocupacional de las universidades de Alicante y Miguel Hernández de Elche, coinciden en destacar el cambio de tendencia observado este último año entre los estudiantes de los últimos cursos al respecto.
«Las empresas aprovechaban mano de obra gratuita ante la precaria situación que atravesaban y los alumnos, por su parte, cedían y tragaban porque no veían más opciones», señalan desde este servicio en la UA. El sector empresarial se ha venido nutriendo de alumnado cualificado con un coste mínimo, pero los universitarios empiezan a negarse a las prácticas sin recibir remuneración y desde el otro lado han empezado también a coger el guante y a hacer contratos a los mejores.
«Se están tramitando cada vez más contratos remunerados. Antes se dejaba libertad al alumno siempre que la empresa cumpliera con los contenidos formativos obtenidos en la Universidad, pero las cosas están cambiando», precisan desde el Observatorio.
En concreto en la UA, de las 6.504 prácticas de alumnos contabilizadas en empresas, apenas 150 recibieron a cambio una contraprestación económica el curso pasado. Las cifras constatan que apenas un 2,5% del alumnado que hizo prácticas cobró, aunque si nos remontamos al curso 2012-13 el avance resulta espectacular porque de los 3.931 alumnos que hicieron prácticas, sólo 34 recibieron algún dinero a cambio. La cantidad media estipulada asciende a 420 euros mensuales, pero esto se cumple sólo en los pocos contratos que se firman.
En la mayoría de los casos se hacen convenios en los que el empresario determina si paga algo, dato que empieza a convertirse en una «buena costumbre», según apuntan los académicos. Tanto el rector de la UA, Manuel Palomar, como la responsable de gestión de datos y estadísticas del Observatorio de la UMH, Lola López, coinciden en destacar su compromiso porque la totalidad del alumnado cobre por las prácticas en empresas. «Las empresas se están comprometiendo cada vez más y especialmente en el sector hotelero y turístico están encantadas con nuestros alumnos», subraya Palomar. «Hacemos mucho hincapié en que se les pague porque es como debe ser».
López afirma por su parte que «siempre exigimos a las empresas que paguen a los alumnos. Creemos que deben recibir una beca por el trabajo que realizan». La UMH gestiona prácticas con más de 9.000 organismos de toda la provincia y el curso pasado más de 4.600 estudiantes realizaron prácticas en empresas. Las del área de la salud en general son clínicas en centros públicos y no se cobran.
