Más verde que Shrek. Así está la laguna artificial que se ha formado tras las últimas lluvias en medio de la playa de la Albufereta, donde lala arena ha desaparecido en una extensión que supera los 50 metros de anchura y que llega prácticamente a la orilla.
La laguna acumula verdina por la putrefacción del agua que lleva días estancada, en concreto desde las lluvias fuertes del 13 de octubre, hace ya más de dos semanas. También es visible la espuma que la recubre, así como barro, cañas y desperdicios que van cayendo, plásticos y otros. «Se empieza a secar y parece gelatina», explicó una bañista mientras observaba el lago. Varias vecinas de la Albufereta que suelen bajar a la playa todos los días a tomar el sol añadieron que se trata de agua de lluvia y del mar estancada y mezcladas.
«El temporal se llevó la arena y por la noche el mar se pone bravo y entra. Ahora el agua se está pudriendo y a veces huele mal», dijeron. El hedor era notable ayer en sus proximidades y los síntomas de descomposición se apreciaban sólo con pasear al ladoEl hedor era notable ayer en sus proximidades y los síntomas de descomposición se apreciaban sólo con pasear al lado. «Y ahora no hay muchos mosquitos porque ha pasado el calor», indicaron las bañistas, que han notado que cuando entran en el mar el agua apenas sube de nivel y no les cubre durante muchos metros. El estado en que se encuentra la playa es chocante en una ciudad turística como Alicante. Porque además de la laguna que parte en dos la arena de la playa, varias conducciones se han quedado al aire y un lavapiés está fuera de su sitio, con riesgo de quedar sumergido.
Cada vez que llueve con intensidad, la playa de la Albufereta sufre destrozos al desembocar en la misma arena el barranco Juncaret-Orgegia, que lleva al mar el agua pluvial procedente de distintas localidades de la comarca. La última vez que fue objeto de una intervención fue el 11 de septiembre, cuando el Patronato de Turismo y Playas del Ayuntamiento ordenó la reparación de los desperfectos que las precipitaciones ocasionaron en el arenal tres días antes.
En aquella ocasión, los operarios trabajaron más de diez horas para reponer los cientos de metros cúbicos de arena que se llevó el temporal por el barranco al aumentar el caudal, utilizando la misma arena que acabó en el mar o cogiendo de las zonas no dañadas.
La demora en el arreglo de los últimos daños se debe a la petición que formuló la asociación de vecinos Playa Blanca de la Albufereta, que reclama una actuación más ambiciosa que evite esa pérdida de arena tan a menudo, según explicó ayer la concejala de Turismo y Playas, Eva Montesinos. La edil indicó que el Ayuntamiento está en conversaciones con la Dirección General de Costas, a la que compete la reparación de la playa, para realizar una reposición de arena más duradera. La Albufereta es salida natural de un barranco, por lo que pierde arena cada pocos meses. La última vez que recibió un aporte fue hace dos años.
