Vecinos de cinco asociaciones El Pla, el Magro de San Blas, el templete de Benalúa, Franciscanos Oliveretes y Laderas del Benacantil denuncian las deficiencias de limpieza en la ciudad y consideran que sus exigencias «se intentan utilizar como argumento» por parte de la UTE que gestiona el servicio «para que el Ayuntamiento ceda a pagarles más para que incrementen los medios de limpieza».

En opinión de las asociaciones, el pliego blinda a la administración local para exigir un mayor grado de limpieza sin coste adicional para las arcas municipales. Además, reclaman que las medidas no se limiten a un plan de choque que «sólo puede ser costoso y efímero» y reclaman medidas que garanticen la limpieza de manera continuada en el tiempo.

Para ello, proponen crear un observatorio o mesa de limpieza que localice los principales problemas y aborde las soluciones. Las asociaciones sostienen que, entre las deficiencias del servicio hay «un déficit y/o defecto de adecuación de los medios utilizados para la ejecución del contrato» y también un problema de «organización».

Reunión

Por su parte, el equipo de gobierno recordó que el miércoles mantendrá una reunión con UTE Alicante «para tratar el problema de suciedad que afecta a Alicante». El alcalde, Gabriel Echávarri, aseguró que «si la oposición quiere participar en la reunión, este equipo de gobierno no va a poner ningún impedimento».