La Colla Ecologista d´Alacant ha presentado un escrito en la Confederación Hidrográfica del Júcar en la que reclaman a la presidenta, María Ángeles Ureña, que extreme la precaución en la próxima limpieza del Barraco de Aguamarga para evitar riesgo de inundaciones en caso de gota fría. La falta de limpieza ha hecho que el barranco se haya convertido en una especie de selva vegetal y el propio Ayuntamiento de Alicante ha pedido la intervención de la Confederación. Los ecologistas advierten, en este sentido, que la zona en la que se pretende hacer esta limpieza (tramo final del barranco) es interés especial en cuanto a la fauna y flora que alberga.
«La aplicación de maquinaria pesada sobre ecosistemas sensibles supone un atentado a la biodiversidad ni conveniente, ni necesaria. Entre las especies afectadas están los erizos (especie protegida) que tienen un mecanismo defensivo que, ante una situación de peligro, les hace permanecer en bola siendo víctimas seguras ante la maquinaria pesada», apuntan en su comunicado.
Según La Colla, «la consideración de nuestros barrancos como meros canales de desagüe implica una minusvaloración de la riqueza biológica que albergan. Una limpieza civilizada y valorando los valores de la zona sería la que se hiciera de forma manual, sin aplicar maquinaria pesada, eliminando las especies invasoras -principalmente cañas y mimosas-) extrayendo los vertidos de escombros. El retranqueo de las construcciones que invaden su cauce también estaría en la línea que proponemos», subrayan.
