Como monologuista se presentó ayer en la Audiencia Nacional la concejala de Alicante Marisol Moreno para declarar como imputada por los delitos de injurias a la Corona y contra los derechos fundamentales a raíz de los comentarios ofensivos que realizó en Internet, y sobre esa faceta creativa logró que se centrara la mayor parte de su comparecencia judicial. Un interrogatorio que durante algo más de media hora condujo el magistrado José de la Mata con alguna intervención puntual del fiscal Carlos Bautista quien, como publicó este diario, fue sancionado el pasado año precisamente por sus manifestaciones en Twiter a través de un perfil falso.

De sport, con una mochila roja a la espalda e intentado que los nervios no le jugaran una mala pasada compareció la edil, quien debe a sus compañeros del PP y Ciudadanos en la Corporación y al sindicato Manos Limpias el que ya no sea una extraña en el registro de acceso a la Audiencia Nacional. Los tres colectivos presentaron otras tantas denuncias contra Moreno por el contenido de tuits y artículos en su blog en los que arremetía sin distingos contra el anterior Rey, contra las corridas de toros o contra políticos como Celia Villalobos, de la que llegó a decir que la mataría si se la encontrara en un bar de ambiente por el apoyo que la diputada del PP prestó a una iniciativa del anterior ministro de Justicia.

Sobre esta esta última cuestión se interesó el fiscal, quien preguntó a la edil si era partidaria de acabar con la vida de los representantes públicos. «No, y menos ahora que yo también lo soy», aseguran fuentes presentes en la declaración que respondió la edil, quien aprovechó para explicar al juez y al fiscal que ese comentario estaba relacionado con un monólogo suyo que versaba sobre un hombre que intentaba conseguir una subvención de la Administración para matar a un político, pero que no conseguía el dinero porque siempre le faltaba algún papel».

Para apuntalar aún más la vinculación de los comentarios por los que está imputada con el monologuismo insistió en que estos aparecían junto a su nombre artístico (@MarisollaRoja), y no firmados por Marisol Moreno, y hasta sacó a relucir los dos premios que ha obtenido en el concurso de monólogos de Clan Cabaret.

A preguntas tanto del magistrado como del fiscal, la responsable de Juventud y Protección Animal del Ayuntamiento de Alicante reiteró su arrepentimiento por haber realizado estas manifestaciones e incidió en que cuando las escribió nunca pensó que la pudieran conducir hasta la Audiencia Nacional ya que entonces sólo era una activista que pretendía captar la atención, sin conseguirlo.

El elefante y la prescripción

Tras la declaración y sobre la mesa del juez queda pendiente de resolver, además del futuro del caso, el escrito presentado por el letrado Jose Luis Romero, abogado de la edil, en el que plantea la prescripción del presunto delito de injurias y calumnias contra la Corona que se le imputa a su clienta por su comentario sobre la muerte de un elefante a manos del anterior Rey, cuando llamó «asesinos» a los Borbones. Romero se apoya en el hecho de que estos delitos prescriben al año y el comentario data de abril de 2012.

La exdiputada de IU y actual asesora del Ayuntamiento de Madrid, Esther López, el dirigente de esta formación Fran Pérez y un representante de Izquierda Republicana acudieron a apoyar a Moreno.