El presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, ha destacado esta mañana la necesidad de vincular la Universidad de Alicante con el tejido empresarial. "Es necesario dar estabilidad financiera a los campus, pero ya sabemos como estamos", ha añadido el president antes del inicio de la apertura oficial del curso académico de las universidades valencianas en Alicante.

A primera hora de la mañana, el rector de la UA, Manuel Palomar, ha desactivado la protesta prevista por los alumnos de Derecho, dos de los cuales iban a encadenarse a la Mano de Azorín y a iniciar una huelga de hambre para pedir que se ampliara el número de asignaturas pendientes para no pasar de la licenciatura al grado. El rector ha acordado mantener una reunión mañana con los alumnos, aunque éstos ya se han mostrado satisfechos por el compromiso de Palomar de que la convocatoria extra incluiría a aquellos que tuvieran hasta tres asignaturas pendientes.

Estabilidad para las universidades

Ximo Puig ha manifestado que su propósito es una nueva ley de financiación de las universidades valencianas para darles "estabilidad" aunque ha añadido que para ello precisa de "recursos económicos".

Este objetivo no es posible, ha proseguido, con el actual sistema de financiación autonómica "injusto y asimétrico" ya que es un "obstáculo insalvable".

Pese a las dificultades económicas, ha señalado que la Generalitat Valenciana ha aprobado "medidas puntuales" para tratar de paliar algunos efectos de la crisis y su repercusión en la educación superior.

Entre ellas ha citado, con un presupuesto de un millón de euros, un nuevo sistema de becas a favor de los que quedaron excluidos de la universidad por la subida de tasas de 2012 o la exención de las citadas tasas para víctimas de la violencia machista, o a sus hijos.