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Vuelta al cole sin ansiedad

Las jornadas de puertas abiertas vinculan a los niños de 3 años con sus maestros, aulas e instalaciones y a las familias con el centro

El colegio público Enric Valor recibió a los alumnos de 3 años y sus familiares un par de días antes para acercarles el nuevo escenario de los próximos meses ISABEL RAMÓN

El colegio público Enric Valor ha llevado a la práctica un método con el que evitar la ansiedad propia del primer día de clase tanto para los niños más pequeños, de 3 años, como para sus propios padres, sobre todo cuando son noveles.

«Recibir unos días antes a los niños de la mano de sus padres para que recorran las instalaciones, conozcan dónde van a pasar muchas horas a lo largo de los próximos meses y pongan cara a sus maestros, es una medida que favorece la incorporación progresiva de los más pequeñitos».

Hoy es un día, en general de lloros entre estos niños que se desprenden de sus padres para incorporarse a un ámbito muy distinto. Los colegios disponen de una semana para la incorporación progresiva de estos niveles educativos, aproximadamente unos cinco niños por día para que se vayan aclimatando. Que de antemano hayan visitado el colegio «facilita mucho el acceso», como subraya el director del Enric Valor, Miguel Andreu.

La jornada de puertas abiertas actúa como un pistoletazo de salida para la vuelta al cole. Son unas horas en las que el niño ve a otros compañeros, siempre de la mano de sus padres; así como a sus maestros, lo que les aporta una «seguridad extra. Observan el medio acompañados y cuando esta mañana entren en el aula ya solitos, no supondrá tanto trauma», destacan en el centro.

Como remate de la visita, los niños se explayan en la zona de juegos y el arenero, «pero la experiencia es importante que la vivan también los padres de antemano, porque tienen tanta o más ansiedad que sus propios hijos muchas veces».

Horarios flexibles

A lo largo del este mes de septiembre los colegios actúan de modo más flexible en los horarios para este nivel educativo, facilitando a los padres que los recojan antes de hora si les viene bien por sus ocupaciones laborales, de forma que al niño no se le hagan tan largas las primeras sesiones.

A partir del mes de octubre, sin embargo, se recupera la normalidad y los horarios se cumplen de 9 de la mañana a 5 de la tarde.

Los directores advierten de la ausencia de personal técnico-higienista en los colegios para los niños más pequeños de 3 años, de ahí que se insta a los padres a llevar a cabo durante el verano un proceso del control de esfínteres, medida se advierte desde que en abril se solicita la matrícula.

«En general está controlado pero puede haber un retroceso en algunos al empezar las clases. De modo puntual se requiere la presencia de un familiar para que se corresponsabilicen, pero de ninguna forma estará el niño sin cambiar todo el día», afirman.

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