¿La Generalitat va a intervenir las diputaciones, como teme el PP?
Intervenir como tal, no. Pero sí una intervención democrática. Hay una ley de coordinación que desde el diálogo se va a aplicar.
Las diputaciones se han dedicado a cosas no prioritarias. Ahora hay que ponerlas a hacer lo que de verdad hace falta. Están para apoyar a los ayuntamientos y a la Generalitat, ese es su auténtico papel. La ley dice que las diputaciones tendrán que seguir las directrices que fije la Generalitat para solucionar los problemas de los ciudadanos y esa ley se va a aplicar.
Entonces no tendrán ninguna autonomía, serán un ente subsidiario de la Generalitat?
Tienen autonomía para gestionar recursos. Pero una diputación no puede ser un gobierno autonómico en pequeño. Las diputaciones nacieron como el primer intento descentralizador, en el siglo XIX. Pero en el siglo XX aparece un nuevo modelo que es el autonómico y todavía no se ha hecho un buen encaje. Hay que superar las duplicidades y desde luego no pueden tener el papel tan político que tenían, entre otras cosas porque sus miembros no son elegidos por sufragio universal. Ahora bien, la Generalitat también puede a su vez cederles competencias, ¿por qué no? Por ejemplo, vamos a crear una Agencia Tributaria Valenciana que debe estar sostenida por las diputaciones, porque lo han hecho muy bien en esa materia. Así que crearemos un consorcio para ese asunto.
Precisamente, la Diputación de Alicante ha sido noticia este verano por el sueldo de sus miembros, concretamente porque su presidente ganaba más que usted como presidente de la Generalitat, situación que se da en otras muchas instituciones.
Hay que alejar del debate «sanguinario» el tema de los sueldos de los representantes públicos y abordarlo sin demagogia y desde la seriedad. Es obvio que este no es un momento para subirle el sueldo a ningún político porque todavía estamos en el fondo de la crisis. Pero hay que regular esta cuestión y también hay que reconocer que hay instituciones donde las retribuciones están muy infladas. También hay que regular el asunto de los asesores, tanto en número como en proporcionalidad.
Pero hay cuestiones que dañan a la vista y no hace falta que un periódico las denuncie para corregirla. Nosotros vamos a tratar de regular todo esto en el ámbito de la Comunidad Valenciana. Vamos a dictar una norma y estamos viendo si puede ser de obligado cumplimiento; si no puede ser, al menos que exista y sirva como orientación.
