La Comunidad Valenciana dispone de más de 300 plazas preparadas a través de su red pública de albergues para atender la llegada de refugiados «desde ya» y la próxima semana comenzará a diseñar con otras administraciones y entidades sociales una red mayor de acogimiento.

Así lo anunció ayer la vicepresidenta Mónica Oltra en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell, en la que también informó de que cuentan con un presupuesto inicial de más de 620.000 euros para atención a refugiados y que los albergues disponibles son los de La Florida, en Alicante, y los de Alborache, Benicàssim, Piles, Benicarló, Jaume I y Chera en las provincias de Valencia y Castellón.

La directoral de la residencia juvenil de La Florida, Elena Roselló, afirmó que el centro dispone de 176 habitaciones en sus tres plantas, de las cuales aproximadamente la mitad están ocupadas en estos momentos por estudiantes. «Tenemos preparadas 96 camas para acoger a los refugiados, y están preparadas para atenderles desde ya mismo», añadió.

El Consell aprobó una declaración institucional de apoyo a refugiados y exiliados en la que reconoce sentirse «atónito e impotente» ante las noticias de estos días sobre la llegada masiva de refugiados sirios a Europa y, especialmente, la negociación abierta en el seno de la UE sobre un reparto de cupos por países.

Ante esta crisis humanitaria, la Generalitat pide al Gobierno español «una mayor sensibilidad» en esa negociación comunitaria, ya que según Oltra no se trata de cifras frías sino de personas que huyen de la guerra, y le insta a que no negocie a la baja sino que esté «a la altura de la dimensión de la tragedia».

El Consell recordó al Ejecutivo central que rechazar a personas que huyen de la guerra en su país es «un crimen de guerra» y remarcó su «predisposición» a que la Comunidad sea «acogedora» de refugiados y a constituir una red que, entre otras medidas, contemple el acogimiento de entre dos y tres refugiados por familia acogedora.

Habilitar más espacios

A principios de la próxima semana se reunirán con las diputaciones provinciales, la Federación Valenciana de Municipios y Provincias y los grandes ayuntamientos de la Comunidad, aparte de con entidades sociales públicas y privadas, para ampliar la cifra de plazas preparadas para la llegada de refugiados, bien en pisos vacíos del parque público de la Generalitat o de los ayuntamientos, plazas libres en colegios mayores o albergues privados.