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La complejidad técnica bloquea el AVE privado a Alicante-Madrid

El objetivo de la ministra de Fomento de contar con el operador antes de final de año choca con el escaso interés de las empresas por los costes del proyecto y las pegas del Consejo de Estado

El AVE ha supuesto una revolución en los viajes entre Alicante y Madrid, pero los costes operativos disuaden a la iniciativa privada. RAFA ARJONES

Las pegas del Consejo de Estado, la reticencia de las empresas por el alto canon económico que exige Adif y el abandono de la familia Lara, principal «socio» de la ministra Pastor, han bloqueado el plan para incorporar un operador privado que compita con Renfe en la línea de alta velocidad entre Alicante y Madrid, que, salvo milagro técnico, se aplazará para la próxima legislatura. La proximidad de la disolución del Parlamento por la elecciones generales de diciembre ralentizan definitivamente uno de los proyectos estrella de la ministra de Fomento, Ana Pastor, ligados al desarrollo de la alta velocidad en España.

Y es que la ministra Ana Pastor le han crecido los enanos en este tema en los últimos meses. Con la legislatura camino de su final y en su haber la inauguración del exitoso AVE entre Alicante y Madrid, el Ministerio de Fomento ha visto, sin embargo, que las dudas técnicas, la falta de previsión y, sobre todo, la ausencia financiación le van a impedir cumplir con el objetivo de incorporar un operador privado para competir con Renfe en el corredor de alta velocidad Alicante-Puerta de Atocha.

Pastor está empeñada en sacarlo adelante, pero en las últimas semanas y tras las dudas del Consejo de Estado sobre su proyecto, se encuentra ahora también con las reticencias del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro y de Álvaro Nadal, uno de los gurús económicos del presidente Mariano Rajoy. El tiempo corre en su contra porque, además, las empresas que mostraron interés por el proyecto no aceptan el canon que deben pagar para que sus trenes circulen por las vías propiedad de Adif. Fomento ha prometido rebajas de entre el 30% y 50% pero ni así. Renfe paga ahora mismo unos 500 millones de euros al año por utilizar vias y estaciones del AVE.

La ministra Pastor pretendía tener listos los pliegos y lanzar el concurso antes de que acabara el año pero es prácticamente imposible porque se agota la legislatura y el tema no lo puede afrontar un gobierno con el Parlamento disuelto. Al final y pese a las prisas del Ejecutivo, los trenes privados no empezarán a circular, como pronto, hasta el otoño de 2016, (si es que el nuevo gobierno central sigue con la apuesta) debido a la complejidad del proceso técnico para poner la línea en marcha. La adjudicataria deberá formar a los maquinistas y alquilar los trenes a Renfe, que tampoco anda sobrada de material para sus propias líneas. Y eso que, según Fomento, la linea de alta velocidad entre Alicante y Madrid tendría capacidad para duplicar el numero de frecuencias

En principio, los candidatos mejor posicionados para obtener el denominado «título habilitante» eran el grupo Alsa, líder nacional en el transporte de pasajeros por carretera, y la constructora Acciona, pero también se han enfriado debido a los altos costes de la operativa por el canon que hay que pagar a Adif. Es mas, el grupo Planeta, de la familia Lara y al que se situó como mejor candidato se ha ido alejando del plan. La alicantina Vectalia sigue interesada en participar integrada en la plataforma que consiga el concurso. El grupo de la familia Arias negocia condiciones pero todavía no tiene nada cerrado. Vectalia es potente y experto en el transporte urbano e interurbano por carretera pero el sector ferroviario es nuevo, por lo que su participación dependía de encontrar un operador fuerte con el que asociarse.

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