Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Alberto Bermejo

«Ante el desánimo o la irritabilidad por volver al trabajo, hay que pensar en los parados»

El experto en psicología clínica aconseja elegir días de descanso repartidos a lo largo del año en vez de un mes seguido para evitar problemas de adaptación en la vuelta a la rutina

El psicólogo Alberto Bermejo. VÍCTOR MIRALLES

¿Cuáles son los síntomas de lo que se conoce popularmente como síndrome postvacacional?

Estas personas pueden tener dolor de cabeza, desánimo, irritabilidad e incluso pueden experimentar problemas para dormir, náuseas y problemas digestivos. Todos los síntomas están relacionados con problemas de adaptación al entorno laboral.

Y, en los casos más graves, ¿qué síntomas se pueden llegar a padecer?

Descarto que haya incidentes severos. Si los hay, estamos hablando de otros problemas relacionados con el trabajo,compañeros, jefes o familia. Podemos encontrar un desánimo profundo, depresión o ansiedad clínica, pero sería algo excepcional. Lo normal son problemas que, conforme pasan los días, desaparecen. No podemos psicopatologizar la vida cotidiana, no hay que buscar problemas donde no los hay.

¿En qué trabajos son más frecuentes los problemas al reincorporarse tras las vacaciones?

No hay muchos estudios en esta materia pero las profesiones que pueden conllevar una mayor dificultad a adaptarse son las relacionadas con la sanidad o la educación porque sus vacaciones son más largas. También sucede en los trabajos más duros físicamente.

El último estudio de Adecco señala que el 30% de los trabajadores españoles está sufriendo o padecerá el síndrome postvacacional. ¿Ha aumentado en los últimos años el porcentaje de pacientes que acuden a consulta con estos síntomas?

Ni ha incrementado ni ha disminuido. El 30% es una exageración o se ha considerado como síndrome postvacacional cosas muy leves. El trabajo es un bien valioso. Hay que comprender que después de las vacaciones podemos tener desánimo o irritabilidad, pero hay que pensar en los parados, que a ellos no les importaría tener un síndrome que les durara un mes.

¿Qué consejo daría a los que vuelven al trabajo estos días?

Los que aún están de vacaciones deberían, cuatro días antes de volver al trabajo, descansar más e ir haciéndose a la idea. Algunos especialistas recomiendan empezar a mitad de semana en vez de al principio, y así el fin de semana está más próximo. Además, las actividades de ocio que hayan podido hacer en verano no hay que abandonarlas del todo y hay que incorporarlas a la rutinas.

¿Tomarse las vacaciones espaciadas en vez de seguidas todo un mes es una forma de evitar este tipo de malestares?

Por supuesto, de esta forma el shock es mucho menor. En España se suele coger un mes de vacaciones y después cuesta incorporarse pero, si las cogemos repartidas, será mas fácil volver.

Compartir el artículo

stats