Donde antes estaban las dependencias del PSOE, en la segunda planta del edificio antiguo del Ayuntamiento ahora hay un cartel hecho a boli sobre un folio de cuadritos donde pone: Partido Popular. Ante otra puerta, en otro folio con la misma letra, se anuncia el despacho de Asunción Sánchez Zaplana. Ya dentro los concejales del PP y uno de sus asesores intentan aclararse con el aire acondicionado que en algunos despachos no acaba de funcionar bien. Al fondo del mismo pasillo, los concejales de Ciudadanos protestan porque EU no ha recogido todas sus cosas aunque se lo han pedido varias veces. Efectivamente, nada más entrar se ven carteles de EU, fotos de Pavón con su programa electoral, carpetas y trastos, aunque al menos las estanterías están vacías. «Se lo hemos pedido varias veces a Pavón pero no acaban de recoger», indicaba Cifuentes para añadir que «así no podemos empezar a trabajar». Pero no eran ellos los únicos algo descentrados. Una funcionaria recurría una chuleta para ver en qué despacho y en qué teléfono está ahora Pavón: «Es que quieren mantener los mismos teléfonos que antes aunque cambien de despachos». Pero las quejas no se limitaban ayer a las dependencias de la oposición. En alcaldía, el calor era insoportable. No se hizo bien lo del aire aquí», señalaba un funcionario de la última planta del edificio nuevo. Dos plantas más abajo en el gabinete de prensa aterrizaban dos asesores, y es que en Prensa habrá tres personas, una por cada grupo del tripartito. De momento ayer empezaban a familiarizarse con las instalaciones los asesores de Compromís y del PSOE, a la espera del de Guanyar que aún no ha sido seleccionado. Aseguran que van a trabajar los tres para todos pero que cada uno sabrá sobre todo de las áreas que ostenta el grupo que los han nombrado.