«A ver si hay suerte y se consigue la declaración de BIC para que la proteja (a la Peregrina).¡Nosotras a rezar, que por falta de rezos no va a ser!», dijeron tres de las monjas que custodian la Reliquia en el monasterio de la Santa Faz, Sor Gladys, Sor María Clara y Sor Clara Isabel, tras tener conocimiento de la nueva petición para que la romería, una tradición alicantina con 526 años, sea declarada Bien de Interés Cultural Inmaterial por la Generalitat.
La madre superiora, Sor Expiración, espera un final feliz para esta nueva petición tras caducar el expediente que inició el Ayuntamiento en 2002 después de que el pleno aprobara la petición a partir de un informe que un año antes hizo el entonces cronista oficial de la ciudad, Enrique Cutillas. «¿Pero esto se podrá conseguir? Sería algo muy bueno. Todo lo que se haga por la Santa Faz es poco. ¡Son más de cinco siglos, se dice pronto!».
«Como viene ocurriendo desde hace 526 años, el segundo jueves posterior al Jueves Santo, alicantinos y visitantes, este año más de 200.000 personas, peregrinan masivamente desde Alicante hasta el monasterio en el que se guarda y venera la Santa Faz, una parte del sudario que utilizó la Verónica para secar el rostro de Cristo en su camino al Calvario. Esta extraordinaria expresión cultural y religiosa alicantina merece la protección de la Generalitat a través de su declaración como Bien de Interés Cultural». Es la justificación del proceso que acaba de reactivar el nuevo partido Esperanza Ciudadana, que ha registrado la petición en la sede del Consell en Alicante. Su presidente, Santiago de Munck, llevó el escrito a las monjas, que respaldan la protección de esta tradición y sus protocolos.
