La mayor parte de las alegaciones a la Actuación Territorial Estratégica (ATE) de Ikea en Alicante que se están estudiando por parte del Ayuntamiento y de otros sectores de la ciudad busca disminuir la superficie total del proyecto, sobre todo en lo referente al centro comercial y tiendas anexas.

Así lo ha señalado hoy el alcalde de Alicante, Miguel Valor (PP), a preguntas de los periodistas tras la rueda de prensa de presentación del dispositivo especial de seguridad de la Santa Faz de este año.

Según Valor, el plan contemplado actualmente es "casi el doble" de grande que las instalaciones que la multinacional sueca tiene en Murcia.

"No queremos que el comercio se marche de Alicante y vaya a parar todo a la zona de Ikea; nos parece muy bien que esté, que haya un centro comercial y tiendas también, pero no tantas", ha dicho.

El Ayuntamiento ha solicitado a la Conselleria de Infraestructuras ampliar el plazo de alegaciones en 20 días más, que se sumarían a los 45 previstos inicialmente.

En todo caso, Valor ha explicado que la intención del consistorio es seguir los plazos establecidos en un inicio, por lo que su idea es llevar las alegaciones para su aprobación al pleno de este mes de abril.

Así, ha insistido en la multitud de reuniones de empleo, urbanismo, estrategia o sostenibilidad, entre otras, que se están llevando a cabo durante el día de hoy y las últimas semanas.

"Ikea siempre sí, pero con comerciantes, Coepa, sindicatos y todo el mundo; el acierto ha sido ir todos juntos, porque tendremos mucha más fuerza", ha remarcado Valor.

La ATE que permitiría la llegada de Ikea a los terrenos de Rabasa está promovida por la sociedad Alicante Avanza -participada por el empresario Enrique Ortiz, imputado en el caso Brugal- y se encuentra ahora en fase de exposición pública.