Cuenta la tradición que San Blas fue un médico y obispo de Armenia, hoy considerado como el patrono de los enfermos de garganta por su don de curación milagrosa. La parroquia de San Blas de Alicante, dentro de los actos en honor a su patrón, celebró ayer la bendición del pan contra estos males, que viene muy bien a causa de tanta gripe y catarros en estas fechas.