Antes de que se celebren las próximas elecciones autonómicas y municipales los padres de alumnos tendrán que llevar a cabo otra votación, la de la jornada continua, siempre que se cumplan las previsiones que ayer puso sobre la mesa la Conselleria de Educación. El director general de Personal, Santiago Martí, informó a los representantes docentes de que la orden se publicará «antes del proceso de admisión del alumnado» para el curso que viene.
Este compromiso obliga a disponer para mayo del porcentaje definitivo necesario parra que cada colegio pueda cambiar el horario actual y reunir todas las clases por la mañana, según el respaldo que obtenga de las familias.
También se reiteró que la oferta de las próximas oposiciones docentes será de 655 plazas y que el nuevo currículo de Secundaria al que obliga la LOMCE se negociará en breve.
Paros de estudiantes
Por su parte, los directores de Secundaria preparan una reunión con la dirección territorial semejante a la que ayer mantuvieron sus homólogos de Valencia. Sobre la situación en que queda el derecho a huelga de los estudiantes sin necesidad de permiso paterno, estos responsables de centro descartan informar a cada uno de los padres sobre la decisión que adopten sus hijos. «Los alumnos solo estarán obligados a comunicarlo al centro con cinco días de antelación, y el centro lo hará saber de modo general a las familias. El control de faltas de asistencia lo llevará después cada profesor en función de que el alumno le haya indicado si ha hecho huelga «como sucede con cualquiera que hace una huelga», indicaron a este diario.
Retrasar el inicio de curso en septiembre, así como la implantación de la LOMCE en Secundaria, por considerarlo precipitado, son otros temas a abordar.
