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Los traumatólogos detectan más lesiones por la práctica de fútbol en césped artificial

La dureza de la superficie provoca daños en el cartílago de la rodilla, tendinitis, así como problemas de ligamento cruzado y menisco. Las consultas por problemas en las articulaciones aumentan un 20%

El auge en los últimos años de los campos de césped artificial ha disparado las lesiones de rodilla. SERGIO FERRÁNDEZ

Hacemos más ejercicio, pero a un precio muy alto. Traumatólogos de la provincia han detectado un considerable aumento de las lesiones en articulaciones ocasionadas por la práctica de determinados deportes, entre ellos el fútbol en campos de césped artificial. Se trata de una superficie «mucho más dura que la de un campo de césped normal, lo que incide de lleno en las alteraciones del cartílago en la rodilla, en las tendinitis, así como en las lesiones de ligamento cruzado y de menisco por los giros», señala Simón Campos, jefe de Traumatología del Hospital General de Alicante.

Este tipo de campos de fútbol ha ido sustituyendo en los últimos años a los de hierba convencional, entre otros motivos por el menor coste de mantenimiento de los mismos, que no requieren de tanta agua. Colegios, clubes deportivos e instalaciones municipales de todos los barrio cuentan con este tipo de campos de césped artificial en los que adultos y niños de todas las edades juegan al fútbol. En este sentido, junto al aumento de las lesiones por la práctica de deportes, ha ido bajando en los últimos años la edad de los pacientes. «Tenemos chicos de 17 ó 18 años con lesiones importantes de rodilla, aunque a esas edades procuramos no operar y resolver el problema con sesiones de fisioterapia y corrigiendo lo que se hace mal para que la rodilla no sufra», señala Campos. Los últimos avances en instalaciones deportivas parece que también ayudarán «y ya se están probando los campos de fútbol mixtos con hierba natural y sintética, que son mucho más blandos».

En los últimos años las lesiones de este tipo han aumentado hasta en un 20% en la provincia y no sólo por la práctica del fútbol. La fiebre por correr también está llenando las consultas de los traumatólogos. «Parece una actividad muy simple, pero en realidad todo tu peso cae sobre las rodillas, lo que unido a la dureza del terreno por el que se suele correr hace que se disparen las lesiones de cartílago». Dolencias que comienzan con un dolor intenso «y que pueden llevar a una pérdida de cartílago y a una artrosis». La colocación de prótesis en todos estos casos ha caído notablemente en los últimos años ante la aparición de nuevas técnicas para tratar de conservar la articulación. «Aplicamos distintas técnicas regenerativas con células madre y factores de crecimiento», señala Simón Campos. Sólo cuando ya no queda otro remedio «recurrimos a prótesis»

Otros deportes que han ganado adeptos en los últimos años y que tampoco se libran del incremento de lesiones son el pádel, el tenis o el golf, «que han provocado un aumento considerable de la patología del bíceps, como las roturas y las tendinitis, además de las lesiones en el codo», explica Fernando Martínez, jefe del servicio de Traumatología del Hospital de Sant Joan. Entre los aficionados al gimnasio las patologías que más están llenando las consultas de los especialistas «son las lesiones del tendón del bíceps y sobrecargas por el levantamiento del peso, así como las lesiones del manguito rotador en el hombro». Matínez destaca que en muchos de estos casos, el uso de un material deportivo en mejores condiciones evitaría buena parte de estas lesiones.

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