La presencia de grupos de jóvenes en las últimas fechas practicando «puenting» desde la nueva pasarela del Barranco de las Ovejas ha alarmado a los vecinos, que cada vez ven a más personas saltando al vacío pese a que es un cauce en obras y está prohibido el paso. Ante esta situación, la Policía Local controlará que no se haga «puenting» dentro de sus cometidos de vigilancia en esa zona de Alicante puesto que los practicantes rompen los precintos de seguridad de la pasarela inacabada y sin anclajes, que es como se quedó al paralizarse el proyecto.

Desde el Ayuntamiento recordaron que el Barranco de las Ovejas es una zona que se encuentra en obras, acometidas por la Conselleria de Infraestructuras, y que están inacabadas. En el marco de estos trabajos se construyó la pasarela aún precintada, desde la que saltan los jóvenes.

La paralización de las obras en el Barranco de las Ovejas ha provocado una elevada degradación ambiental en el cauce, con suciedad y plagas, lo que provocó numerosas quejas de los vecinos. Los trabajos se frenaron en seco a finales de 2013 dejando una tubería eléctrica submarina a medio enterrar, lo que provocó la formación de un talud de tierra en la desembocadura impidiendo la libre circulación del agua, y acelerando el proceso de degradación del caudal, que ha estado cubierto por una masa de algas, plantas y basura frente a las viviendas, hasta que se limpió a finales de julio con la apertura de un canal para facilitar el movimiento de las aguas verdes estancadas aunque los limos acabaron en la playa.

Esta limpieza, tras seis meses de atasco, se realizó durante doce horas y costó 1.500 euros.