Una quincena de miembros de Stop Desahucios de Alicante ocuparon ayer la sucursal de Nova Galicia de la Rambla con el objetivo de instar a la entidad a entablar negociaciones con ocho familias en riesgo de desahucio. Entre ellas se encuentra la de Javier, un hombre enfermo de cáncer de próstata que ayer mismo ingresó en el hospital para ser operado y que, con su mujer y dos hijos, sólo percibe unos 250 euros al mes.

Tal como señaló Desirée Gómez, de Stop Desahucios, «pese a su situación, Javier no entraba en el código de buenas prácticas porque por herencia tiene un tercio de la casa familiar en la que vive su madre y de la que no puede disponer, pero el banco ya consideraba que tenía otra casa», para añadir que «él va pagando cada mes pero con los ingresos que tiene no puede seguir. Lleva un año intentando que el banco le apruebe una reestructuración de la deuda y no lo conseguía».

Finalmente, y ante un gran despliegue policial, los responsables de la entidad recibieron a cuatro miembros de la plataforma que consiguieron el establecimiento de un calendario de reuniones con las ocho familias que pueden perder su casa. En el caso de Javier, Desirée Gómez señaló que «el banco nos ha dicho que en una semana habrá una solución para él y además se abrirá un hilo de interlocución para conseguir un alquiler social».