La Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Transportes y AENA instalará una barrera en el acceso al aeropuerto de Alicante-Elche para evitar los "abusos y las irregularidades" que comenten taxis no domiciliados en la localidad ilicitana, según ha anunciado la Generalitat en un comunicado.

El mecanismo se abrirá con un código de barras que irá impreso en la autorización del taxi para poder operar en la terminal. Los técnicos de la Conselleria serán los encargados de crear el sistema informático que hará factible esta medida.

En materia de seguridad, se incrementarán las inspecciones hacia aquellos conductores que realicen un "uso excesivo" de las autorizaciones. Estas inspecciones se realizarán en carreteras para lo que se ha pedido la colaboración de la Guardia Civil, o se efectuará "un requerimiento" para que se presente en las oficinas de la Conselleria.

De acuerdo con la Generalitat, según la legislación vigente y "con carácter excepcional", se permite que los servicios de recogida de viajeros en puertos y aeropuertos "puedan ser prestados al amparo de autorizaciones de transporte discrecional en vehículos de turismo domiciliados en municipios distintos" al que se ubica el puerto o el aeropuerto, siempre que haya sido "previa y expresamente contratados" y que el destino de tales servicios se encuentre en el municipio en que esté domiciliada la autorización.

"ABUSO" Y "FALSIFICACIÓN"

Sin embargo, han apuntado que "se está observando un abuso e incluso la falsificación" de estas autorizaciones en taxistas de fuera de Elche que operan en el aeropuerto de Alicante-Elche.

La Conselleria de Infraestructuras con el objetivo "de mitigar" este problema ha mantenido una serie de reuniones tanto con el colectivo de taxistas afectados como con el resto de entidades implicadas para "proteger los derechos de los consumidores y operadores" del transporte para asegurar "la calidad" y "seguridad" del servicio y erradicar el intrusismo.