El regreso masivo de bañistas desde las playas del litoral de Elche y Santa Pola fue el detonante de los importantes atascos de tráfico que se produjeron a primera hora de la noche de ayer en la carretera N-338, que da acceso al aeropuerto de El Altet y comunica la N-332 con la A-70. Las retenciones llegaron a ser de unos ocho kilómetros, extendiéndose por la N-332, según la Guardia Civil de Tráfico, que también confirmó que no se había producido ningún accidente en esta zona. Las citadas carreteras son lugares habituales de atascos en estas fechas, al contar con un solo carril para cada sentido. La N-338, además, suma esos desplazamientos veraniegos al tráfico hacia las instalaciones aeroportuarias durante todo el año, y que ya provoca de por sí retenciones con mucha frecuencia.