Ante las serias dudas existentes en el Ayuntamiento para solicitar al Ministerio de Hacienda el crédito de 25 millones para pagar todas las facturas pendientes, la alcaldesa manifestó ayer que si finalmente se opta por no pedirlo, el pago a los proveedores seguirá siendo prioritario, por lo que «en el presupuesto del próximo año todas las concejalías se apretarán el cinturón al máximo para hacer frente a estos pagos».

Sonia Castedo y el concejal de Hacienda, Juan Seva, reiteraron ayer que «no se puede dar la imagen de que el Ayuntamiento está en bancarrota porque no es cierto. Alicante está mejor que muchos ayuntamientos y no digamos que de algunas comunidades autónomas», subrayó Juan Seva, quien añadió que la decisión definitiva sobre la petición del crédito a Madrid no se tomará hasta la víspera del 20 de septiembre, que es la fecha límite para pedirlo. El edil de Hacienda indicó que se van a mantener contactos con el Ministerio de Hacienda para intentar buscar un acuerdo para suavizar las condiciones requeridas para obtener el préstamo de 25 millones, aunque no oculta que la situación es muy complicada por las duras contrapartidas que exige el Gobierno central, hasta el punto de que sería el Ministerio de Hacienda el que confeccionaría el presupuesto municipal, con lo que las cuentas municipales quedarían intervenidas.

En cualquier caso, Castedo y Seva intentan tranquilizar a los proveedores y recalcan que se pagarán las facturas pendientes aunque sea con algunos meses de retraso si no se recurre al crédito.

La oposición reaccionó ayer con contundencia ante esta situación y el portavoz socialista, Miguel Ull, señaló que « si Montoro nos interviene ya sabemos lo que hay, pero si no pagamos a los proveedores, ¿ quién se va a fiar del Ayuntamiento? ».

El concejal del PSOE afirmó que «estamos sufriendo las consecuencias de casi dos décadas de gobiernos populares que han convertido el Ayuntamiento de Alicante en un caos y ahora vemos que ni la alcaldesa ni el concejal de Hacienda saben qué hacer para arreglar lo que ellos mismos han generado con su incompetencia».

Por su parte el portavoz de EU, Miguel Ángel Pavón denunció que «la nefasta gestión económica de Castedo y Seva cada vez sale más cara a los alicantinos, que finalmente son los paganos de esa mala gestión, mientras la deuda con proveedores, un eufemismo para ocultar que buena parte de esa deuda está vinculada a los pagos y sobrecostes de las grandes contratas y a los empresarios que las gestionan, como Enrique Ortiz, no deja de crecer».

El edil de EU añadió, además, que «tenemos ya de facto un presupuesto intervenido por esas grandes contratas y podemos pasar a un presupuesto intervenido por Montoro. Nuestra alternativa, sistemáticamente rechazada por Castedo y Seva, es rescatar esas contratas».