Una manera para que los jóvenes hagan «comunidad». Así ven el botellón Derek, Vide y Jacobo, tres jóvenes norteamericanos, que han llegado a Alicante desde su Philadelphia natal para mejorar su nivel de español en un curso intensivo de un mes en la UA.

En el descampado de la avenida de las Naciones, a la altura de la zona del golf, los tres norteamericanos, junto a otro grupo de amigos, disfrutaban la noche del pasado viernes de unas copas al aire libre, aprovechando la agradable temperatura del verano. «Nos encanta esta forma de hacer comunidad, de disfrutar los jóvenes de los jóvenes. Es fantástico», aseguraba Vide, mientras sujetaba en su mano derecha un vaso. En la misma línea se mostraba Derek, aún con un mejor español y una sonrisa contagiosa: «Me gustaría llevarme este ambiente a mi país, porque sería fantástico disfrutar de los amigos así. Pero va a ser imposible. Allí está prohibido beber en la calle, así que no podemos imaginar cómo sería estar así, con la gente, como aquí».

Por su parte, Jacobo, también nacido en la zona este de EE UU, afirmaba que el ambiente que estaba viviendo era «único». «Estamos con los amigos, en una zona apartada, disfrutando de la noche», añadía el joven norteamericano, que se apoyaba en un amigo español para dar con las palabras que consideraba oportunas.