La titular de Educación presentó ayer a los representantes sindicales un nuevo plan piloto que pretende implantar el libro electrónico con tablets en las aulas de quinto de Primaria el curso que viene, y en sexto el siguiente, cuyo coste corre a cargo de los padres.

En los primeros compases de este curso, a consecuencia de las dificultades económicas de muchas familias para comprar los libros de texto y del impago de las becas por parte de Educación, la consellera Catalá lanzó la pretensión de crear bancos de libros a través de las asociaciones de padres. Este otro plan piloto no ha fructificado porque descargaba toda la organización sobre el colectivo paterno, como ayer corroboraron las federaciones provinciales de padres mayoritarias de los centros públicos y concertados.

Las tablets, en cualquier caso, tendrán que cumplir determinadas características técnicas que Educación dice que publicará en su web, para poder incluir los libros de texto digitalizados ya acordados con diversas editoriales, o bien los contenidos que decida el profesorado en los centros.

Wifi

Los responsables de Educación sugieren que el coste rondará los 100 euros y que resultará más económico que los libros, pero desde las centrales sindicales reclaman que sea la conselleria la que dote de tablets a los centros para no provocar desigualdades entre alumnos que no puedan costearse el dispositivo digital, ya que las hay que no han podido comprar los libros este año. La normativa exige que los centros tengan wifi.

En cualquier caso la aceptación de este nuevo programa educativo, que será evaluado por la conselleria, será voluntaria y los centros que quieran asumirlo deberán convocar primero al claustro docente y después al consejo escolar porque si se implanta será para todas las materias de quinto.

A partir de que se publique esta resolución en el DOCV, los centros tendrán 20 días para presentar la solicitud y Educación otros 20 para autorizarla.

"¿Las tabletas no provocan miopía?"

La nueva propuesta de la Conselleria de Educación para tratar de introducir el libro electrónico en las aulas dio paso ayer a todo un elenco de ironías a costa del rechazo protagonizado hace tres años por el entonces titular del departamento, Alejandro Font de Mora, contra los ordenadores con que pretendía dotar las aulas de quinto de Primaria el Gobierno socialista de Zapatero con 11,2 millones de euros bajo el argumento de que provocarían miopía en los alumnos. "Celebramos sinceramente que los alumnos valencianos ya no corran peligro de "miopización" con las tabletas", subrayó el delegado de CC OO Roberto Romero a la salida de la reunión. El profesorado se pronunció a favor de la introducción de contenidos pedagógicos por vía electrónica, pero no de que su coste recaiga sobre las familias en general "porque las hay que no pueden permitírselo", lamentó Romero, que exigió a Educación que presupueste las tabletas para todos los colegios. También opina que se discrimina a determinados centros porque el que no tenga wifi instalado queda fuera de este plan piloto.