Nuevo tijeretazo a la inversión. La Conselleria de Sanidad ha decidido reducir en 45,3 millones la partida destinada a construir hospitales y centros de salud en la Comunidad y ha dedicado esos fondos a los gastos de funcionamiento de otras instalaciones sanitarias. El Diario Oficial de la Comunidad Valenciana (DOCV) publicó ayer una resolución del conseller del área, Manuel Llombart, en la que se autoriza una transferencia de créditos entre dos capítulos del presupuesto de Sanidad. Se minora la inversión en infraestructuras y se inyecta el dinero para hacer frente a gastos de funcionamiento. O lo que es lo mismo, para abonar agua, luz y teléfono, entre otras cuestiones. Ese acuerdo se tomó el 28 de diciembre de 2012, en plenas vacaciones navideñas, pero no se hizo público hasta el día de ayer.

En la resolución no se ofrece más información. Simplemente se informa del trasvase de fondos, pero sin aclarar qué partidas concretas se reducen y cuáles se aumentan. Fuentes de la Conselleria de Sanidad, no obstante, detallaron durante la tarde de ayer los motivos que, oficialmente, justifican la modificación. Desde el departamento que dirige Manuel Llombart recordaron que a lo largo de 2012 se paralizó la construcción de varios hospitales y centros de salud por culpa de "problemas técnicos". Y en total, esos imprevistos conllevaron un remanente de 45,3 millones.

La Generalitat estudió a qué partida destinar ese dinero y finalmente decidió reservarla para hacer frente a los gastos de funcionamiento. Desde Sanidad corroboraron que parte de ese dinero ha servido para pagar facturas de agua, luz y teléfono, pero también para acondicionar nuevos centros de salud recién construidos. Ese bocado de 45,3 millones supone que el Consell dejó de invertir en nuevas instalaciones más de la mitad del dinero que tenía previsto a lo largo del año. Cuando confeccionó las cuentas de ese ejercicio, presupuestó 86,1 millones, de acuerdo con los datos recogidos en los propios Presupuestos. Pero ahora, con la transferencia de créditos publicada ayer en el DOCV, esa cuantía se ha reducido finalmente hasta apenas 40,8 millones de euros.

Este tijeretazo en las inversiones es ya una tónica durante los últimos años en la Comunidad. En las cuentas de 2012, la Generalitat suprimió siete de los nueve centros de salud pendientes en la provincia. Sólo asignó fondos para levantar las instalaciones de Benidorm y del barrio de Benalúa de Alicante, y eliminó la dotación económica para los centros de Sax, Sant Joan d'Alacant, Orihuela, Castalla y otros tres en la ciudad de Alicante. A nivel global, el presupuesto para la construcción de nuevas infraestructuras se desplomó un 58% en la Comunidad. Eso, en las cuentas de 2012.

Ni un centro nuevo

En las de este año, las cifras han languidecido aún más. Hasta el punto de que no ha planificado ni un nuevo centro de salud nuevo. Por descontado, tampoco los dos previstos en 2012 y que no se construyeron. Ni el de Benalúa, ni el de Benidorm-Els Tolls.

Y ninguno de los dos, de hecho, se paralizaron por problemas técnicos, como alega Sanidad. El caso más sangrante es el del barrio alicantino. Los vecinos llevan años y años esperando que se levante allí un centro de salud, pero la Generalitat ha sido incapaz de construirlo. Y eso, que el exalcalde Luis Díaz Alperi se comprometió a ello en su primer mandato (1995-1999) y a que el ya ex conseller de Sanidad Luis Rosado incluso llegó a decir que una de sus principales prioridades era que de una vez por todas se procediera a la construcción del ambulatorio.

Fabra asegura que el Gobierno mejorará la financiación en 2014

El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, se mostró ayer convencido de que el Gobierno central reformará el actual modelo de financiación autonómico el próximo año. Durante su visita de ayer a Madrid para participar en la ejecutiva nacional del partido, el jefe del Consell volvió a reivindicar la llegada de más fondos estatales. "Lo hemos pedido ahora y siempre. Necesitamos una mejor financición y en este año se va a trabajar en el modelo que se pondrá en marcha en 2014", sentenció. En términos similares se postuló en Alicante el conseller de Economía, Máximo Buch: "La Comunidad merece un trato más positivo. Hay que hacer piña entre todos para hacer valer lo que nos corresponde". A. F.