La estación intermodal y el soterramiento definitivo de las vías en Alicante pasan a la historia. El secretario de Estado de Infraestructuras y Transportes, Rafael Catalá, admitió ayer de manera oficial lo que era un secreto a voces en Alicante desde hace más de un año. Fomento intenta que el AVE entre Madrid y Alicante sea una realidad en el verano de 2013 -la intención es que llegue para las fiestas de Hogueras- pero lo hará en superficie y a la actual estación, que se va a mejorar al máximo,y será la que acoja la Alta Velocidad durante muchos años. La crisis económica ha obligado a aparcar sin plazos la construcción de la segunda fase del soterramiento de las vías, así como de la estación intermodal, una gran infraestructura llamada a centralizar bajo tierra las comunicaciones de autobuses, taxis y tranvía en su extensión hacia el aeropuerto.

La caja pública está a cero y Catalá no se anduvo por las ramas. El Ministerio de Fomento no descarta nada, pero no tiene fechas ni dinero. Es más, el propio secretario de Estado presidió un consejo de administración de la sociedad Avant a la que se autorizó a negociar con bancos y cajas una ampliación de la línea de crédito actual de 55 millones de euros inyectando otros 12 millones más para poder acabar las obras y, en concreto, meter los trenes de cercanías (Alicante-Murcia y Alicante-San Vicente) por el túnel soterrado que salvará el paso a nivel de Ausó y Monzó, que desaparece.

La Generalitat, además, no ha aportado todavía ni un euro de los 40 millones comprometidos por su participación en la empresa pública, que anunció que aportaría el pasado mayo tras recibir fondos Feder de Bruselas. El dinero sigue sin llegar, aunque, ayer, un portavoz autorizado del Consell explicó que el retraso se debe a una negociación administrativa para que los 40 millones se inyecten directamente en Avant sin pasar por Valencia.

Catalá presidió la reunión tras visitar las obras del AVE entre Villena y Alicante, con una parada en el Puerto, donde tuvo ocasión de conocer los muelles de la mano de José Joaquín Ripoll. A continuación, se desplazó a la Subdelegación del Gobierno para dar vía libre a la petición de una nueva línea de crédito para Avant, cuyo objetivo es pagar el modificado para eliminar el cambio en el sentido de la marcha en San Gabriel y que los trenes de cercanías entren por el túnel del AVE, donde se construyen dos vías de ancho internacional y una de ancho ibérico. Lo que está claro es que todo acabará en la parte derecha de la estación actual, donde habrá, como ha venido publicando este periódico, espacio para autobuses y taxis, una cafetería y un pasillo con tiendas de acceso al hall principal para los pasajeros que lleguen de Madrid. Catalá aseguró que se va a hacer "la mejor estación posible", pero sobre la actual.

Sobre la fecha concreta de la llegada del AVE, Catalá, no quiso adelantar ningún mes en concreto. "Será en 2013, seguro y lo antes posible. ¿Verano? Empieza el 21 de junio y quizá estemos un poco justos, pero todo va a depender de la evolución de los trabajos, ya no es cuestión de tramitaciones ni de fondos porque la financiación está asegurada a falta de esos 12 millones de euros que negocia con los bancos Avant". El número dos de la ministra Ana Pastor en Fomento señaló que "la ministra lo anunciará en breve, pero no va a haber ningún retraso más". Quizá fue más explícito con la alcaldesa con la que se reunió posteriormente y que llegaba al encuentro con ganas de preguntárselo. El objetivo es llegar para las fiestas de Hogueras.

Tanto el PSOE como UPyd, reclamaron al Ministerio de Fomento que acelere al máximo las obras. El diputado del PSOE Gabriel Echávarri llegó a apuntar que con su partido en el Gobierno el AVE hubiera llegado a Alicante el próximo mes de diciembre.

El Ayuntamiento no tiene todavía la solución urbanística

La alcaldesa Sonia Castedo admitió ayer que la ordenación de los terrenos liberados de las vías de Renfe, entre la avenida de Salamanca y la Vía Parque, también sufre retrasos y no ha llegado todavía a la Conselleria de Infraestructuras. Castedo indicó que la cantidad de suelo a liberar sigue en manos de los técnicos municipales. La intención es crear un gran parque central sobre 220.000 m2 para romper la "cicatriz" -en palabras del Rafael Catalá- entre los barrios de San Blas y la Florida.

En el nuevo documento que hizo público este periódico en julio se han suprimido las vías rápidas de tráfico que flanqueaban dicho parque y que iban a suponer un efecto barrera equivalente a las vías férreas suprimidas mediante la eliminación de los grandes viarios rectilíneos previstos y la creación de glorietas sucesivas. En esta nueva ordenación se tuvieron en cuenta dos aspectos tan relevantes como son el incremento de viviendas en la zona hasta alcanzar los 220.000 m2 contemplados en la revisión del PGOU, lo que representa entre 2.000 y 3.000 viviendas, y la obligatoria recuperación y conservación de la fachada de la antigua estación. La mayoría de los pisos se concentra en la parte sur, la más cercana a la estación, incluyendo las fachadas inacabadas al futuro parque en los barrios de Benalúa y Ali Park, y eliminando las paredes medianeras existentes.