La caída de la quinta palmera en menos de un mes estuvo a punto de acabar en tragedia. El ejemplar, ubicado en el paseo de Gadea, se desplomó sobre la calle pasadas las dos de la tarde de ayer destrozando un coche que había aparcado y alcanzando con sus ramas a una mujer que pasaba por la acera y que sufrió heridas leves. La oleada de incidentes ha despertado la preocupación de los ciudadanos y la polémica sobre las causas que han provocado que en apenas cuatro semanas cinco ejemplares se hayan venido abajo en diferentes zonas de la ciudad. Aunque hasta ahora el Ayuntamiento de Alicante venía apuntando al elevado peso que soportan las copas cargadas de frutos, el incidente de ayer ha llevado a que los técnicos municipales se replanteen que pueda haber algo más. El concejal de Atención Urbana, Andrés Llorens, mostró su desconcierto y preocupación e informó de que se ha solicitado un estudio a una empresa especializada para determinar las causas y poder tomar medidas. Por el momento, el edil indicó que se redoblarán las labores de inspección y la poda de las palmeras del casco urbano.

Unos trabajos que ya se intensificaron con los primeros desplomes a primeros de julio, pero que no han impedido que ayer otro ejemplar de gran porte cediera. Y eso que, como confirmaron fuentes de la empresa concesionaria de zonas verdes (Viveros Albatera), un día antes se habían revisado las palmeras del paseo para detectar posibles riesgos. Las mismas fuentes señalan que, al menos en apariencia, la palmera presentaba un aspecto sano antes de caer y que, después de venirse abajo, el tronco parecía robusto.

La palmera se quebró a escasos centímetros de su base y se desplomó quedando cruzada en la avenida de Doctor Gadea a la altura del número 11 -entre las calles Pintor Lorenzo Casanova e Italia- obligando a cortar el tráfico. El tronco cayó sobre un coche aparcado y las ramas alcanzaron a una mujer de 30 años que pasaba en ese momento por la acera. Desde la Concejalía de Seguridad sostienen que la joven sufrió rasguños en los brazos y que fue atendida in situ por los sanitarios que se trasladaron en ambulancia hasta el lugar. El incidente provocó un gran revuelo en el entorno, al tratarse de una zona muy céntrica en la que hay varias terrazas de bares y restaurante que, en ese momento, tenían varios clientes.

Los Bomberos se desplazaron hasta el lugar para trocear el tronco de la palmera con el fin de poder retirarlo y que la grúa pudiese llevarse el coche siniestrado. Una vez retirados los restos de la palmera, los operarios de la concesionaria de mantenimiento procedieron a podar las palmeras anexas y a dejar el tronco del ejemplar desplomado a ras de suelo. Los trabajos obligaron a mantener cortado el tráfico en la avenida hasta pasadas las cinco de la tarde.

Tras el suceso, el concejal Llorens admitió su creciente preocupación por las numerosas caídas de ejemplares. "Aparentemente están sanas, pero queremos saber las causas concretas y la forma de actuar", señaló ayer el edil tras indicar que se había solicitado un estudio para aclarar los motivos. Desde Atención Urbana barajan como principal causa la sobrecarga de las copas, argumentando que la cosecha de dátiles de este año es mayor y que, a diferencia de otros años, las palmeras no se podaron en primavera para descargarlas de dátiles por recomendación de la Generalitat, para evitar la plaga de picudo.

Los expertos, no obstante, coinciden en que el peso no puede ser la única causa de que cinco palmeras hayan cedido en tan poco tiempo y apuntan a que el tronco se haya debilitado a consecuencia de algún insecto o enfermedad. Por su parte, los grupos de la oposición denuncian una falta de mantenimiento y de prevención. En esa línea, el portavoz adjunto del PSOE en el Ayuntamiento, Gabriel Moreno, acusa al equipo de gobierno local de permitir el incumplimiento del pliego de condiciones de la contrata de mantenimiento y "poner en riesgo a la ciudadanía". Por su parte, desde área de Atención Urbana asevera que se realizan inspecciones periódicas y que cada año se talan entre 120 y 130 palmeras que podrían presentar algún riesgo.

"Una palmera que esté completamente sana no se cae". Hablan los expertos:

Expertos consultados por este periódico coinciden al apuntar que detrás de la caída de una palmera puede haber diferentes factores, pero señalan que si el ejemplar "está completamente sano" no se viene abajo aunque sus copas pesen a consecuencia de la maduración de los frutos. Desde la directiva de la Asociación de Empresas Productoras de Plantas de Viveros de la Provincia inciden en que "una palmera salvaje no se poda nunca y no por ello se cae". Al respecto, indican que "el tronco está preparado para soportar el peso de la copa, incluso en caso de vendaval". El peso "puede ser un detonante", pero "tiene que haber algo más", sostienen las mismas fuentes. Aunque se desconocen las causas, desde la asociación apuntan a la posibilidad de una debilitación de los troncos. Algo que puede estar producido por "el ataque de un insecto, hongos o una falta de nutrición". En cualquier caso, apuntan que habría que realizar un estudio exhaustivo y constatan que la caída de cinco palmeras en apenas un mes es síntoma de que "algo está ocurriendo".