La Conselleria de Justicia acaba de adjudicar por dos millones de euros el servicio de reeducación a menores delincuentes a una sola empresa y ahora prevé sacar a concurso también el servicio de acogida de menores desamparados alegando que la ley de Contratos le obliga a ello. La licitación supone adjudicar a una sola entidad los trabajos que llevan acometiendo durante años entidades tan arraigadas en la provincia como la fundación Nazaret en Alicante, la fundación San José Obrero en Orihuela o la asociación Los Arcos en Altea.

Estas empresas sin ánimo de lucro, que llevan acometiendo desde hace una década -20 años en el caso de Nazaret- la prestación de estos servicios que competen a la Conselleria de Justicia y que ésta delega en ellas, han sobrevivido mediante subvenciones. La licitación del contrato para menores que cumplen medidas judiciales en medio abierto -aquellas que no requieren de un internamiento- ha dejado sin éste servicio a tres entidades de la provincia, que según denuncian no pudieron presentarse al concurso por "trabas administrativas". La directora general del Menor de la Comunidad Valenciana, Cristina Martínez, indicó a este diario que asegura desconocer por qué no optaron a la licitación, "abierta a todos", a la vez que añadió que lo "único" que puede aceptar de las críticas que le están lloviendo por parte de las entidades es que no se les dio mucho tiempo para optar al concurso, ya que desde que se publicó la licitación en el DOGV tenían dos semanas para presentar ofertas, más unos días de margen, señala Martínez, al estar avisados por ella misma de que el servicio iba a salir a concurso antes de que éste se hiciera público. Justicia ha adjudicado el servicio a jóvenes que cumplen medidas judiciales a la fundación Diagrama, que ya se encargaba junto al resto de entidades de estas prestaciones. Esta fundación es la responsable también de la gestión de la mayoría de centros de internamiento de menores de la Comunidad Valenciana -en la provincia es la gestora de los dos existentes, El Reiets de Alicante y el de Villena- así como del sistema de adopciones.

Según ha podido saber este diario la Conselleria de Justicia prevé también sacar a concurso los servicios de acogida de menores en desamparo, otra de las patas en las que se sustenta la razón de ser de Nazaret, San José Obrero y Los Arcos. La licitación, que según fuentes de Justicia "terminará haciéndose porque así obliga la Ley de Contratos" podría abocar al cierre a estas entidades al suponer que una sola empresa se hiciera con el servicio como contratista. La licitación supone acabar con el sistema de subvención, algo que pedían las propias entidades, que estaban ahogadas por los impagos, pero que no se esperaban un concurso convocado tan rápido a mitad de año y tras haberse aprobado las resoluciones a favor de la subvención de 2012.

La directora del Menor explicó a preguntas de este diario que no hay prevista una licitación para sacar a concurso la atención a menores en desamparo, si bien afirmó que no puede descartarlo. "Es que Intervención me tira para atrás la subvención. Desde 2011 estamos obligados a tener un contratista, al que le aseguramos el pago, al que le podemos exigir y al que si no cumple se le puede reclamar", indicó Carolina Martínez. "Mi obligación es que se cumpla la Ley", añadió.