Las reiteradas denuncias vecinales han llevado al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) a abrir una investigación sobre la descarga de mercancías a granel en el Puerto y a reclamar tanto al Ayuntamiento como a la Autoridad Portuaria un mayor control de la actividad así como la adopción de medidas para evitar la contaminación y las consecuencias que puedan derivarse para la salud de los vecinos. En concreto, el Seprona se refiere al muelle 13 -ubicado en la zona de poniente, frente a la avenida de Loring-. En un escrito remitido a la Gerencia Municipal de Urbanismo, esta unidad explica que ha constatado como una empresa descargaba carbonato sódico produciendo polvareda "sin que el material estuviera humedecido" y sin crear "una atmósfera húmeda" en el entorno para evitar su dispersión. Además, sostiene que la tolva en la que se desarrolla la actividad "carece de pantallas laterales cortavientos", como las que sí existen en el muelle 17.

A instancias vecinales, el Seprona abrió un expediente que será remitido al juzgado, como se explica el escrito remitido al Ayuntamiento, en el que se indica que la descarga de graneles es "una actividad potencialmente contaminante" y puede conllevar problemas de salud para las personas, por lo que recuerda la obligación de las administraciones de adoptar medidas de inspección para garantizar el cumplimiento de la ley. Al respecto, este servicio pide al Consistorio información sobre si las empresas estibadoras cuentan con autorización para la actividad y sobre si se ha tomado alguna medida de control o sanción sobre ellas. Unos datos que, desde el grupo municipal de EU, también exigirán a Urbanismo.

El Seprona indica que ya se ha puesto en contacto con la Autoridad Portuaria "instándole" a cumplir las "buenas prácticas ambientales" en sus actividades y requiriéndole que tomen medidas correctoras que "eviten o minimicen" las molestias a los vecinos de los edificios próximos a los muelles en los que se descargan graneles.