El abrupto cierre de la compañía Spanair dejó ayer sin vuelo a otros 247 pasajeros en el aeropuerto de El Altet. Estos viajeros que tendrían que haber despegado pertenecían a los vuelos con destino Orán, Barcelona y Madrid.

La suspensión de vuelos también obligó a cancelar otros cuatro trayectos con destino Alicante. Los pasajeros afectados que se dirigían a Argelia despegaron finalmente en un avión de mayor volumen de la compañía Air Argelí sobre las 16.45 horas. Hasta cuatro miembros de este pasaje pasaron la noche en la terminal del aeródromo alicantino, en las camas facilitadas a través de Cruz Roja por la Subdelegación del Gobierno, que fueron retiradas al mediodía.

Desde primeras horas de la mañana, los pasajeros continuaron acercándose a las ventanillas de la compañía en quiebra en el segundo día de la crisis. Los trabajadores facilitaron hojas de reclamación y explicaron los derechos a los afectados, aunque aseguraron que las quejas registradas fueron pocas en relación al pasaje previsto para ayer, estimado en un total de 247 personas. Según informó Aena, en el aeropuerto de Alicante se recibieron tan sólo 18 denuncias, mientras que en el aeropuerto valenciano de Manises se registraron más de 150.

A pesar del malestar de los usuarios y también de los empleados de la compañía, no se registraron incidentes el domingo, aunque durante la mañana hasta seis policías reforzaron la seguridad en las ventanillas de Spanair. Uno de los afectados, visiblemente enfadado, levantó la voz a uno de los empleados, quien acudió a uno de los agentes y la situación se resolvió de inmediato. "Tengo a mi mujer y mi bebé en Argelia, deberían haber regresado hoy y mis padres tenían que partir en el vuelo de esta mañana", comentó Said Mahsac, el protagonista de este episodio. "No dan ninguna solución, ¿por qué tengo que volver a pagar?", lamentó. Más calmados, pero con la misma rabia contenida, otros pasajeros como Rebeca Ureña, quien había comprado el billete para mañana a Palma con escala en Barcelona, manifestaban su desconcierto ante la falta de soluciones de la aerolínea.

La hija de otro viajero perjudicado, Radia Tafat, declaró que no entendía por qué el cierre se había llevado a cabo de una forma tan estrepitosa. Afirmó que no le parecía "normal". "Nosotros tenemos casa en Alicante, pero quien ha venido de vacaciones con el dinero justo estará desesperado". Una terrible improvisación que se evidencia en el paradójico caso de Kamal Hanib, quien compró el billete el viernes a las cinco de la tarde, horas antes del anuncio de la quiebra.

Desde el Gobierno central, el secretario de Estado de Planificación e Infraestructuras, Rafael Catalá, advirtió otra vez a Spanair de que debe cumplir con sus obligaciones hacia los pasajeros afectados por la suspensión de las operaciones. Spanair dejará en tierra hasta el viernes a un total de 83.000 pasajeros en toda España. Se cancelarán 878 vuelos: 530 con salida o llegada a Barcelona, 318 a Madrid y 30 a otros aeropuertos como El Altet.

Huelga de Iberia

Hoy se cancelarán tres vuelos de Iberia con origen en Alicante y otros tres con destino a la provincia debido a la séptima jornada de huelga de los pilotos. Los de salida suprimidos son: IB0351 (7:55); IB0359 (9:40); IB0353 (17:45). Y, de llegadas: IB0350 (7:50); IB0368 (16:00) y IB0356 (20:00).

Acuerdo de reembolso para billetes electrónicos

Spanair ultimó ayer un acuerdo con la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), a través del que permitirá devolver el dinero de los billetes a los viajeros afectados por el cese de operaciones de la compañía aérea. La aerolínea informó en un comunicado de que el acuerdo "facultará a las agencias de viaje a reembolsar el precio íntegro de los billetes a los pasajeros que los hubieran pagado mediante transferencia bancaria o en efectivo".

Los pasajeros que hayan comprado los billetes mediante una tarjeta de crédito, tanto en la página web o en la agencia de viajes, deberán informarse de las posibilidades de recuperar el dinero a través de su entidad financiera.

Spanair, que todavía no ha evaluado el número total de afectados, considera que el acuerdo con IATA cubrirá la mayoría de las reclamaciones presentadas.

La compañía recuerda que los afectados pueden interponer reclamaciones en las oficinas de ventas, en los mostradores de Aena y en las oficinas de turismo de los aeropuertos, y en la Agencia Catalana de Consumo. La mayoría de las ventanillas de Spanair de los aeropuertos permanecerán abiertas para atender a los viajeros afectados, según informó la aerolínea.