Uno de cada seis pacientes en lista de espera quirúrgica en la Comunidad Valenciana están pendientes de ser intervenidos de cataratas, según los datos de la Conselleria de Sanidad, que cifran en 27.486 el número total de personas que llevan tres meses a la espera de entrar en un quirófano, 4.336 de los cuales son para recuperar la visión.

Oftalmólogos consultados por este periódico manifestaron ayer que sale mucho más económico operar en la pública que en la privada y que algunas clínicas intervienen demasiados casos de la denominada "catarata californiana", que es la menos avanzada.

Las mismas fuentes apuntaron que no todos los hospitales pueden tener el mismo rendimiento quirúrgico, ya que los que tienen docencia y médicos en formación como La Fe, el Peset, el Clínico, el General de Valencia y el de Alicante cuentan con un equipo extra de cirujanos que son los médicos en formación que pueden operar bajo la supervisión de un adjunto, con los mismos resultados.

Algunos especialistas se mostraron partidarios de la medida propuesta por la conselleria, sin que el incremento de casos por sesión quirúrgica vaya en detrimento de la calidad.

El estudio previo

Por otra parte, el catedrático de Oftalmología y presidente de la Fundación Oftalmológica del Mediterráneo (FOM), José Luis Menezo, manifestó ayer a este periódico que en una intervención de cataratas lo que lleva más tiempo es el estudio previo que hay que hacer para conocer cual es la lente más adecuada para cada paciente. El coste de una intervención de cataratas se diversifica en dos partes: el precio de la lente que se implanta al paciente, que siempre corre a cargo de la conselleria (dentro del capítulo de las endoprótesis) y el de la intervención en sí, que es el que cuesta 750 euros de media en la privada.

Menezo indicó que en una mañana se pueden operar entre 25 y 30 casos de cataratas y por la tarde, otras tantas, ya que una intervención de este tipo suele durar unos quince minutos.

La FOM dispone de siete quirófanos y una plantilla de quince especialistas.

Lo que temen algunos de los profesionales de este centro es que con el plan de ajuste la conselleria reduzca a la mitad el precio que pagaba por este tipo de intervenciones, manteniendo la misma demanda.