Diego Peñarrubia, a sus 13 años, es de los que conciencian a sus padres, y no al revés como parece más natural, para que no gasten agua. Es uno de los estudiantes del Instituto Figueras Pacheco que ha participado en el proyecto "Actuando en el agua", que vincula a los departamentos de Ciencias Sociales y de Inglés en la enseñanza tanto de la solidaridad como del cuidado por el medio ambiente y el inglés.

"La directora nos explicaba el proceso del almacenamiento del agua y al mismo tiempo, durante el cuso pasado, veíamos desde nuestra ventana cómo iban haciendo la obra del aljibe. Ahora ya es un elemento más del centro", nos cuenta Diego. "Desde entonces tengo asumido que hay que ahorrar agua", añade.

Escenario integrado

Ha quedado tan integrado el aljibe -que ayer se inauguraba con la presencia de numerosas autoridades y antiguos alumnos-, que sobre el colector del agua se levanta un escenario para las celebraciones del centro, y ya hace las veces de punto de reunión en el recreo.

"La arquitecta, Sonia Miralles, ha tenido mucho gusto al integrar ambas construcciones con las plantas que tenemos y el resto del centro", explica la directora, Raquel Royo, responsable a su vez del departamento de Inglés que participa en el proyecto.

Royo destaca especialmente el impacto educativo que la construcción del aljibe ha supuesto para los alumnos. "Cuando esté lleno tiene una capacidad de hasta 8.000 litros, que bastarán para regar todas las plantas del patio y el jardín".

La conducción interna del colector recogerá el agua de la lluvia que caiga en el techo del instituto "de forma que al mismo tiempo que no se malgasta, se ahorra", añade la directora. "En lugar de tirarla por la red del alcantarillado, se acumula mediante una bomba", puntualiza el alumno.

Gracias a la donación de la Fundación Alcoa, este proyecto educativo se ha subvencionado con 44.550 euros y ha puesto al instituto en la pista para proponer ahora la construcción de un huerto escolar en el terreno anexo del nuevo escenario construido sobre el aljibe. "Antes teníamos que alquilar los focos y asientos para cualquier celebración porque no hay salón de actos en este centro, pero con esta obra conjunta lo hemos conseguido todo", concluye la directora.