Algo más de 4 millones de euros ha destinado la Conselleria de Infraestructuras a la construcción de un paseo peatonal en la Universidad que, hoy por hoy, carece de utilidad. El acceso, concebido hace ya cinco años para unir el campus actual con la zona de ampliación universitaria, al otro lado de la autovía de Castalla, fue inaugurado ayer, pero al no estar los terrenos de ampliación del campus urbanizados, desemboca en una maraña de maleza impracticable para el peatón.

De momento, y a partir del 1 de octubre, como significó el rector, Ignacio Jiménez Raneda, este paso inferior lo utilizarán los autobuses lanzadera. El trayecto que ahora realizan estos autobuses desde la parada del tren, en el extremo más alejado de los terrenos por urbanizar, hasta el campus actual por la circunvalación, se acortará desde el próximo mes de octubre atravesando el nuevo paseo, lo que reducirá en 3 o 4 minutos el recorrido, según apuntó el vicerrector Vicente Montiel.

Éste es uno de los escasos casos en los que una infraestructura, la del paso inferior, se adelanta a las necesidades de la comunidad universitaria porque, mientras no se urbanicen los terrenos, el acceso a los edificios con que cuenta el parque científico -Animalario, Nave de Petrología, Servicios de Investigación y Planta Fotovoltaica-, deberá seguir realizándose en vehículo. La propia consellera, Isabel Bonig, admitió ayer que la obra "prepara a la Universidad para la futura ampliación. Esperemos -añadió- que en poco tiempo pueda utilizarse en toda su extensión". Vicente Dómine, director general de Obras Públicas , aseguró que es el mayor paso inferior del mundo, con 25 metros de ancho y cinco de altura. La zona se ha ajardinado con 5.500 metros de plantas sin ampliar la inversión para integrar el campus de forma natural.

El encuentro

La concejala de Urbanismo de Alicante, Marta García-Romeu, presente en la inauguración y a quien la alcaldesa remitió el viernes pasado para cualquier información relativa a los problemas de urbanización de la ampliación del Campus, dijo haber acordado una reunión técnica con Raneda "esta misma semana o la siguiente". Su intención es la de abordar el desbloqueo de dicha urbanización y adecuarla al Plan General en los términos que requiere la Universidad, "a ser posible", dijo. Desde el Ayuntamiento se mantiene que el Rectorado pretendía construir viviendas para financiar nuevos edificios académicos, extremo que desde el gabinete de Raneda se niegan a aclarar. No obstante, el propio rector reclama desde hace años que el Plan General de Ordenación Urbana incluya las "garantías necesarias para el desarrollo de la ampliación", casi 800 metros cuadrados.

Otros 150 metros cuadrados del resto del parque científico ya tienen el visto bueno desde marzo, extremo que dejó atado José Ramón García Antón en su etapa de conseller de Infraestructuras.