La decisión de la Concejalía de Educación de ceder a la Generalitat las primeras parcelas para que se puedan construir centros concertados a cargo de empresas privadas ha empezado a levantar ampollas entre los colectivos que defienden la enseñanza pública.

Los padres, representados por la federación provincial Gabriel Miró, rechazan a través de su presidente, Ramón López, que la gestión de los nuevos colegios vaya a depender íntegramente del modelo de enseñanza concertada, porque entienden que resta participación a las familias en los consejos escolares.

El profesorado, a su vez representado por los delegados sindicales, replica por su parte que antes de destinar los esfuerzos a ceder suelo público a empresas privadas, la Concejalía de Educación debería satisfacer el actual déficit de plazas para niños de 0 a 3 años, a pesar de que este nivel educativo no sea obligatorio. "No se si es causalidad que el nuevo concejal proceda de la presidencia de la federación de padres y madres de la enseñanza concertada y que la primera medida llamativa que adopte sea ceder suelo público porque hay un millar de alumnos que se quedan sin plaza en centros concertados. ¿Cuántos niños de menos de tres años se quedan sin plaza?", expone Ismael Vicedo, portavoz de la Plataforma en Defensa de la Enseñanza Pública.

A Vicedo le parece especialmente "de mal gusto" que uno de lo terrenos elegidos para ceder sea el que ahora ocupan las prefabricadas del colegio Manjón Cervantes. "Es como si les estuvieran echando ya".

Entre las filas socialistas, la diputada Pilar Sarrión lamenta que la solución para acabar con los barracones en los colegios públicos sea "a costa de acabar con la educación pública y dilapidarla en favor de la concertada y privada". Para esta diputada no es ninguna novedad "porque llevan años poniéndolo en práctica y abocando al sistema educativo a una situación dramática". También el portavoz de Compromís en el Ayuntamiento, Tomás Mestre, reclama al concejal que cumpla antes con sus responsabilidades con la enseñanza pública.