La organización agraria Asaja-Alicante alertó ayer de que si persisten las lluvias durante los próximos días puede verse seriamente comprometida la recolecta de la uva de mesa, variedad Aledo, que es la que se consume en Nochevieja para recibir el Año Nuevo. No obstante, fuentes de Asaja apuntaron que, de momento, la cosecha está intacta, aunque habrá que estar atentos a la evolución de las lluvias en los próximos días. De momento, la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología anuncia tiempo seco para los próximos días.

Los beneficios de las precipitaciones se dejarán sentir, por otro lado, en todos los cultivos, especialmente en los de secano, como el almendro, olivar y uva de vino. También permitirá que los cítricos registren aumentos del calibre y mejoría del color y sabor si bien deben reseñarse los daños que están sufriendo los frutos que se encuentran en un estado avanzado de maduración, explicaron fuentes de Asaja. Así en Pego y Dénia, donde se cultivan variedades tempranas de mandarinas, se están registrando daños por "pixat" o mancha de agua. Los técnicos permanecen alerta para detectar más daños, especialmente durante los próximos días por si aparece podredumbre, pero han podido constatar que en la provincia, de momento, no se perciben mermas significativas.

"Estamos comprobando con alegría como este periodo parece ser más lluvioso, que es justamente lo que necesitamos. El verano fue muy duro, las reservas se redujeron de manera considerable por la evaporación y consumo", afirmó el presidente de Asaja, Eladio Aniorte.

Sin embargo y aunque todavía es pronto para que aparezcan los daños en los cultivos, hay comarcas donde ya están preocupados por la evolución que tendrá el tiempo. Los técnicos de Asaja centran su atención en el cultivo de la uva de mesa. En el Alto Vinalopó también se prevé que haya parcelas afectadas de brócoli, zanahoria y chirivía. Los agricultores esperan recuperar la normalidad en breve.