Son plantas de fácil mantenimiento, de crecimiento rápido y muy vistosas. De ahí que en los últimos años algunos arbustos, fácilmente identificables por sus plumeros, hayan sido utilizados para decorar numerosos jardines de la ciudad. Pero presentan un inconveniente: son muy invasores. Aunque así se recoge en un decreto del Consell de 2009, que prohíbe su plantación, estas plantas siguen viéndose en multitud de zonas verdes, por lo que la Conselleria de Medio Ambiente ha pedido colaboración al Ayuntamiento de Alicante para que las retire y evite su expansión.

Y así lo harán desde la Concejalía de Atención Urbana, que ya ha comenzado a elaborar el inventario de las zonas en las que pueden encontrarse estas gramíneas, originarias del continente africano, para proceder a su retirada a lo largo del otoño y el invierno. Entre otros lugares, estas plantas se pueden ver en los jardines de la avenida de la Universidad, en los espacios verdes del PAU-5 de la Playa de San Juan o en la Vía Parque. Como prueba de su expansión incontrolada también se pueden ver algunos arbustos que han crecido junto a las cunetas de varios viales, como la rotonda de la Universidad.

Por ello, desde el departamento de Parques y Jardines tienen previsto dar prioridad a la retirada de los arbustos que hay plantados junto a las calles, en rotondas o medianas, puesto que el paso de vehículos puede potenciar su dispersión.

Las especies en cuestión se denominan científicamente "pennisetum setaceum" y "pennisetum villosum" y se encuentran incluidas en el listado de especies invasoras de la orden del Consell. Desde el departamento que dirige el concejal Andrés Llorens explican que se trata de especies exóticas que se aclimatan fácilmente y que terminan por desplazar a la vegetación autóctona. "Se adaptan muy bien y empiezan a crecer de forma incontrolada", apunta el jefe del departamento de Parques y Jardines, Manuel Martínez, quien confirma que hasta que se aprobó el decreto estas plantas se han estado sembrando en numerosas zonas verdes de la ciudad. No obstante, asevera que desde que salió adelante la orden del Consell, "desde el Ayuntamiento no hemos seguido plantándolas", aunque sí se han sembrado en zonas verdes promovidas por otras administraciones, como es el caso de los taludes de vegetación que el Instituto Valenciano de Vivienda plantó a finales de 2010 en la avenida de la Universidad y que también serán retirados dentro de la iniciativa municipal.

El riesgo que conllevan estos arbustos es, según indica Martínez, que se esparcen con facilidad y desplazan a la vegetación autóctona. De ahí que el Consell haya pedido colaboración al Ayuntamiento "para evitar que puedan extenderse a zonas protegidas" de la ciudad o del resto de la provincia. Tras retirarlos, se sustituirán por otros arbustos del vivero municipal.