La actual distribución de los centros concertados, abiertos a recibir solicitudes de alumnos de toda la ciudad, no se toca, pero la de los centros públicos se va a reorganizar de nuevo. La Concejalía de Educación, dirigida por el expresidente de la federación de padres de centros concertados, Antonio Ardid, quiere volver a distribuir los distritos escolares de centros públicos de la ciudad con la intención de "racionalizar y optimizar" la disponibilidad de aulas.
"Será en función de lo que decida el Consejo Escolar", da por sentado el concejal, pese a que la última vez que se abordó este asunto oficialmente, hace poco más de un año, primó la voluntad del representante de la Conselleria de Educación en Alicante. El director territorial hizo valer entonces su autoridad e implantó la apertura de la ciudad a la hora de pedir plaza en los centros concertados, independientemente de la cercanía del domicilio que es lo que prima para la matriculación en los centros públicos.
Las razones que argumenta ahora el representante municipal para poner sobre la mesa un nuevo cambio escolar, que mantendrá a las familias en alerta hasta saber el centro que les corresponde según lo cerca que vivan del mismo, son "reales. Muchas veces nos movemos por la inercia de la demanda social -concreta Ardid- pero hay que tener en cuenta los datos reales".
Y esos datos, recogidos por la concejalía, apuntan a que la demanda de plazas en el distrito de San Gabriel la puede absorber la vecina zona de Florida-Asís, porque sus colegios suman la mitad de todas las plazas escolares que quedan libres en la ciudad después de la matrícula.
Vuelta atrás
"Mientras en el colegio El Palmeral tendríamos que poner más aulas o ampliarlo, porque ya no caben más alumnos, con sólo cruzar la calle -en referencia a la autovía que comunica con Madrid- contarían con las vacantes del Carlos Arniches", apunta Ardid adelantándose a las posibles críticas. Este distrito de San Gabriel que ahora se quiere fusionar ya formaba parte del de Florida hace cinco años, en que los delegados de CC OO propusieron independizarlo y lo lograron en el Consejo Escolar. Ahora se le quiere dar la vuelta una vez más.
La modificación en la matriculación en Infantil y Primaria afectará a los centros de Secundaria, ya que a cada colegio le corresponde un instituto, según la zona donde se encuentre, y las familias necesitan saber la trayectoria educativa completa de sus hijos antes de optar por la matriculación. En el colegio Pedro Duque, sin ir más lejos, se resisten a que el único instituto público al que puedan llevar a sus hijos sea el Gran Vía, donde suele haber vacantes, y prefieren el Jaume II donde han tenido que arañar aulas de despachos y sobrepasa la ratio en varias clases.
